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Atsuhiro estaba cansado, miraba el reloj en la pared sin cesar, el turno lo tenía más que muerto, deseaba estar en su cómoda cama durmiendo, pero él había decidido desgraciarse la vida estudiando medicina y solo para dejar de ser llamado vago por sus padres. Se desplomó en la silla y cerró un momento los ojos, no pasaría nada si tomaba una siesta de 10 minutos.

-Dr. Sako- Enseguida abrió los ojos, la enfermera lo estaba viendo, se levantó de la silla- Lo llamaron hace 5 minutos, lo buscan en urgencias

-Muchas gracias- El castaño tomó su estetoscopio y corrió por aquellos pasillos, todos lo miraban extraño pero a él no le importaba- Fuera de mi camino

El castaño corrió por las escaleras, cayendo en el proceso pero no le importó, miró el reloj de su mano, apenas eran las 2:30 de la de mañana, suspiró cansado y siguió su camino, al llegar a urgencias deseó no haber sido despertado de su siesta, era un caos total, enfermeras corriendo de un lado para otro, niños llorando, chicas tratando mal al personal y demás.

-Veo que por fin te dignas a venir- El castaño iba a hablar pero el otro Doctor negó- Ve a recibir a la ambulancia, ese paciente es tuyo y será mejor que sobreviva o te despediré

-Sí Doctor- Se alejó del mayor y rodó los ojos, en ese momento quería aceptar aquella renuncia y largarse de ahí, pero debía llevar dinero a su casa, caminó hacia afuera- Hola

-Escuché que te iban a correr- Soltó una de sus compañeras y el chico se encogió de hombros- Sólo a ti se te ocurre ignorar una llamada del Doctor Aizawa

-No lo ignoré, ni siquiera escuché que había llamado- Soltó Atsuhiro con molestia- ¿De que me perdí?

-Bueno te perdiste en ver nuevamente a tu paciente favorito- El castaño rodó los ojos al escuchar aquello- Para eso te llamó Aizawa

-Ni por todo el dinero del mundo volvería a cuidar a ese tonto- Los demás comenzaron reír

-¿De verdad fue muy malo?- Atsuhiro asintió repetidas veces- Bueno regresó por que tiene nuevas quemaduras, creo que fue en una fiesta

-La verdad su vida no me interesa ni un poco, estoy preocupado por la ambulancia, me encargaron ese paciente, lo necesito mantener con vida o me echarán- Soltó el castaño con flojera

Los Doctores siguieron hablando sobre los casos y pacientes que tenían, de verdad el castaño trataba de llevarse bien con ellos pero algunos eran tan tontos que sabía que el dinero los había llevado hasta ahí. Al escuchar las sirenas de la ambulancia tomó una bocanada de aire y la soltó, debía mentalizarse que todo saldría bien, que sólo sería una fractura, pero cuando la ambulancia fue abierta, el entusiasmo se fue al demonio, ahora veía más factible entregar su carta de renuncia.

-Paciente de 20 años, atropellado por un carro- Atsuhiro dejó de escuchar lo que decían, aquel chico se encontraba casi muerto, al ver el monitor vio un pulso débil, su cara llena de sangre y tenía una fractura abierta en su pierna y otra en su brazo- ¿Doctor?

-Lo siento, llévelo al cuarto 3- Se golpeó mentalmente, no podía dejarlo morir- Tenemos que estabilizarlo para mandarlo a radiología y por un tomografía

-Sí Doctor- Dijo la enfermera que los estaba esperando dentro del hospital

-¿Quieres que te ayude?- Atsuhiro miró a uno de sus sus compañeros y asintió- No te preocupes si Aizawa nos dice algo, diremos que era muy difícil el caso

-Gracias Nemoto- Dijo el castaño con una sonrisa

Después de mucho tiempo el castaño pudo respirar un poco más tranquilo el muchacho se veía del asco pero estaba un poco estable, necesitaba indicaciones de sus superiores, cuando vio al pelinegro acercarse, se levantó de la silla y se colocó al lado del chico.

Amor en los pasillos del hospital- DabishigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora