Para cuando se dio cuenta, aquel hermoso hombre de ojos violeta, había plantado una semilla en su corazón. La cual floreció en su pecho por tal amor y esperanza que el príncipe otorgó a ese enamorado Dios.
"I love You Vegitta"
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Entonces, una pequeña tos se hizo presente.
Foolish no era alguien particularmente aislado del resto, pero, últimamente había estado más ausente, aún cuando había dicho que se encontraba mucho mejor después de que la fiebre desapareciera, de la nada dejo de tener cierto contacto con los demás, cosa que fue notada claramente por el arácnido, Badboyhalo, Fit y Vegetta.
Justo ese día, Roier había ido a visitar al dueño del dragón, quería salir a dar una vuelta, ya fuera por una dungeon o mina, no quería mostrarse preocupado ahora por su visible ausencia y de que algo malo estuviera pasando, además, estaba bastante ansioso debido a que hace unos días Cellbit se aislo de igual forma. Por lo cual, quería distraer su mente que le estaba empezando a jugar en contra.
Al llegar, noto que la construcción del dragón, empezaba a tener una nueva zona, al parecer ¿Un acuario? Así que en eso estaba trabajando ahora, una sonrisa se dibujo en su rostro, eso era señal de que su amigo estaba bien.
—Heeeeey Foolish! —. Grita tratando de encontrar al tiburón, sabía que cuando empezaba algo se metía bastante, llegando al punto de ignorar su alrededor.
Al no recibir respuesta decidió bajar hasta allí, si qué debía estar super concentrado en su trabajo como para no oírlo, cuando estuvo lo bastante cerca, pudo escuchar como alguien tosia, se asomo por detrás de una columna y allí estaba su compañero con una mano en su boca y la otra en la garganta, eso le hizo fruncir su entrecejo. ¿No había dicho que se sentía mejor y estaba todo bien? Acaso había mentido...?
Si fuera así. ¿Por qué lo habría hecho? Negó con la cabeza, simplemente se acercó para atraer su atención, puso su mano en el brazo del más alto, atrayendo toda su atención justo después de un brinco, al parecer le había sorprendido por completo su presencia.
—Heeey Foolish. ¿Qué pasa? ¿Estas... Bien?... —. Pregunta cuando ve como el otro se reincorpora y apretá la mano que yacía en su boca, eso le dio mala espina. —Wey?
Por otra parte, el más alto solo oculto su mano, no fue el más cuidadoso en hacerlo, pero solo quería hacer qué Roier ignorara por completo esa situación y que no se preocupe por ello, cosa que no estaba logrando.
—It's nothing. Just the cough keeps bothering —. (No es nada. Solo la tos sigue molestando) Le responde con tranquilidad mientras le sonríe de forma leve.
Esto dejo aún más confundido a Roier, recordaba que efectivamente, el semidiós había dicho que tenía una tos ligera, pero eso que oyó, no sonó como algo ligero, esta bien que fuera pendejo, pero tampoco era retrasado como Para no, notar lo obvio.
–Ohhh entiendo! Pero Foolish, deberías tomar varias cosas entonces. Conozco unos remedios qué uff —. Menciono tratando de despistar al tótem, tratando de hacerle creer que no se había dado cuenta de nada, aún cuando sentía su orgullo ser pisado por ello.