Peter the Pizza Guy

Capítulo 26: Flores en la nieve

Twin líneas de humo se acurrucaron en el aire, desapareciendo en nubes delgadas antes de que pudieran golpear el antiguo techo de madera del comedor de la pizzería. Peter los miró incómodamente, sintiendo que la tensión a su alrededor crecía cada segundo que pasaba sin que ninguno de ellos hablara.

Habían sido recibidos por un Marco menos que satisfecho que, en lugar de entregarles su equipo y la pizza planeada para entregas, les había dicho que se sentaran con él. Los había estado mirando desde entonces, arrastrando su cigarrillo con el mismo equilibrio que Jason, quien aparentemente había decidido imitarlo. Los rostros de los dos hombres mayores eran difíciles de leer, pero para un meta como él, era fácil sentir y oler la nube oscura de emociones que los rodeaba.

Su jefe fue quien finalmente cortó el silencio, su voz más fría que nunca.

"Creo que tendremos que establecer algunas reglas básicas, muchachos."

Jason frunció el ceño, con los dedos apretados alrededor de su humo y la boca cediendo. "No me llames chico, viejo", escupió, con los ojos ardiendo de ira. Nunca parecía cómodo con la autoridad, era un rebelde de corazón, o eso pensaba Peter.

Los ojos de Marco se apretaron. Abruptamente, su mano se convirtió en un puño, aplastando el cigarrillo que sostenía. Lo dejó caer en su cenicero improvisado, una botella de cerveza vacía, y encendió una nueva. A pesar de la tensión que irradiaba de él, no había ira en su olor. La frustración en su mayoría, y un fuerte toque de molestia eran las únicas cosas que podía oler.

"Recuerdame otra vez que te ponga un techo sobre la cabeza, chico." Su mirada no era un resplandor, sin embargo, se sentía tan incómodo como uno solo.

Peter se movió en su asiento, no acostumbrado a que su jefe le hablara en ese tono. Esto le recordó a la escuela secundaria, que pensó que había dejado atrás hace meses. Hace una vida, de verdad, en esas circunstancias.

Él no era el que estaba siendo reprendido, pero aún así, lo inquietaba. Nunca había sido uno para provocar a la gente tan fácilmente como Jason, al menos no mientras estaba fuera de su traje. Bajó la cabeza ligeramente, inquietando cada vez más a medida que crecía su incomodidad.

"Aquí están las reglas por las que pasaremos." Marco tomó otro arrastre, lo exhaló lentamente, aún más humo para unirse a los senderos gemelos. "Son lo mismo que le doy a cada mocoso que trabaja para mí, y los seguirás."

El hombre estaba encorvado en su silla, pero la intensidad en sus ojos era suficiente para hacer que Peter sintiera como si se estuviera elevando sobre ellos. Jason parecía perfectamente amenazado, recostándose y tomándose su tiempo con su propio humo. La furiosa ira en sus ojos se había calmado un poco y ahora parecía más irritado que realmente molesto.

"Tienes tres disparos en esto. Perder el trabajo es una huelga, por lo que va en contra de nuestro negocio." Una pausa, tocó su palo en el cenicero, observando en silencio mientras la ceniza caía en el fondo. "Ayer cuenta como un golpe para los dos. Tienes dos disparos más antes de que te despida."

A pesar de sí mismo, Peter sintió la necesidad de protestar. Habían perdido el trabajo, eso era cierto, pero también habían salvado innumerables vidas mientras lo hacían. Abrió la boca, listo para defenderse, cuando sus ojos cruzaron la mirada constante de su jefe. No parecía alguien listo para cambiar de opinión. En todo caso, parecía tan tranquilo que probablemente era algo que había dicho varias veces antes.

¿Qué podía hacer él? Marco fue de hecho la razón por la que tuvieron acceso a habitaciones asequibles en un edificio de apartamentos algo seguro. No tenía ninguna forma de identificación del gobierno en este mundo, ninguna cuenta bancaria o ahorros lo suficientemente grandes como para permitirle encontrar otro techo fácilmente. Por supuesto, podía quedarse con Jason, pero ni el contenedor ni el garaje eran lo suficientemente grandes para dos personas. Dudaba que el niño mayor quisiera pasar el rato con él hasta el punto de que compartieran un espacio de habitación individual por algo más que una noche.