Peter the Pizza Guy

Capítulo 20: Apariciones

A pesar de tener que hacer una pausa durante varios minutos cada vez que se entregan a miembros del inframundo, Peter y Jason manejaron más pedidos en una noche que el New Yorker durante sus dos semanas enteras trabajando para la pizzería. La motocicleta era mucho más rápida de lo que él podría esperar ser mientras todavía parecía un humano común, pero muy en forma.

Sin embargo, no se sentía completamente inútil. Todos los grupos de delincuentes callejeros a los que se habían acercado habían reaccionado de la misma manera tensa, sacando armas una vez que les dijo que había traído a alguien con él. De alguna manera, su compañero de trabajo siempre logró reducir la situación antes de disparar. No fue particularmente discreto, pero actuó y parecía que pertenecía allí, en las calles de Gotham. Estaba a gusto y su confianza afectaba a todos los que lo rodeaban.

Aún así, recibió muchas miradas sospechosas cada vez que entraba en el lugar de entrega. Su cuerpo era intimidante para Peter, quien probablemente podría sacarlo con las dos manos atadas a la espalda si realmente lo intentaba. Debe ser aún más impresionante para alguien que no podía confiar en la súper fuerza para luchar. Sin él allí para presentar a su nuevo compañero de trabajo, la situación probablemente se volvería agria muy rápidamente.

Pero luego, una vez que se explicó la situación, cada matón que encontraron lo aceptó fácilmente. Seguramente, una vez que terminaran con las presentaciones, no sería de mucha utilidad que él saliera a entregar por la noche. No podía competir con una bicicleta.

Además de unas pocas palabras cada vez que llegaron a una nueva área de entrega, las dos estaban en su mayoría en silencio, el motor cubría cualquier intercambio que pudieran tener. Peter lo apreció, no porque no quisiera aprender más sobre Jason, que hasta ahora no había sido más que amable con él, sino porque realmente no tenía idea de qué decir. Nunca antes interactuó con alguien como el niño mayor, no sabía cómo actuar a su alrededor.

Parecía que al joven le gustaban los deportes. Los únicos deportes en los que él mismo estaba eran parkour, gimnasia y, no es que se lo admitiera a un tipo como su compañero de trabajo, el baile de ballet, que había estudiado cuando era niño. Peor que eso, no lo sabía cualquier cosa sobre los equipos en este mundo. Solo podía rezar para no verse obligado a hablar de eso y revelar su falta de conocimiento.

De cualquier manera, incluso si hubiera querido hablar un poco, la motocicleta y el viento combinados eran demasiado ruidosos para que intercambiaran algo más que gritos. Por supuesto, Peter pudo distinguir fácilmente entre sonidos, pero a estas alturas estaba bastante convencido de que el nuevo tipo no era un meta. Si lo fuera, no era un tipo que afectara su cuerpo de ninguna manera que pudiera notar.

Incluso Ivy había dado un aura extraña con la forma en que las plantas actuaban a su alrededor, y sabía que podía verse bastante extraño cuando realmente soltaba poderes. No había nada de eso allí. Jason olía, parecía y sonaba como un humano normal, aunque uno que era, en esencia, de Gotham.

Como muchos civiles en la ciudad oscura, había una corriente subterránea de sangre y pólvora en su aroma. La violencia estaba en todas partes en las calles, y solo estaba aumentando, parecía que incluso los repartidores se vieron afectados por ella.

Las campanas de la Torre del Reloj acababan de sonar la medianoche cuando terminaron su última ruta. Marco los hizo quedarse con North Gotham, que Peter sabía mucho mejor que el resto de la ciudad. Fue solo un corto viaje a la pizzería desde su último punto de caída y, pronto, estaban frente al restaurante.

La luz estaba encendida como siempre, lo único que cortaba la oscuridad de la calle.
Su jefe estaba esperando dentro de la habitación principal, fumando un cigarrillo enrollado personalizado y leyendo algo en su teléfono. Miró hacia arriba mientras Peter, que no había perdido el tiempo saltando de la bicicleta, asegurándose de hacer una mueca mientras aterrizaba, abría la puerta.