❝our game❞ | haobin

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la molesta luz proveniente del celular del coreano irrumpía con el sueño del chino que daba todo de sí mismo por intentar dormir.

pues todas las luces estaban apagadas y el cuarto estaría en una placentera oscuridad de no ser por el celular de su mejor amigo, quién por alguna razón estaba a nada de fusionarse con el dispositivo en vez de apagarlo y dormir cómo cualquier ser humano haría en ese horario... ¡vamos! eran las 2:54 a.m.

— si no apagas eso ahora juro que voy a golpearte. — habló el chino con una ronca y casi inentendible voz debido a que su cara estaba cubierta por su almohada.

— oh... ¿qué no estabas durmiendo ya? — respondió el contrario finalmente desviando la mirada del bendito celular para mirarlo a él.

— hanbin, ¿cómo podría dormir cuando el brillo de tu celular está al máximo en la completa oscuridad de la habitación y encima debo oír el molesto sonido de tu teclado cuando escribes? — regañó sacando la almohada de su rostro y devolviendo la mirada al contrario.

— ah... así que es eso.

seguido de eso, zhanghao vió cómo su amigo al fin apagaba y dejaba su celular sobre su cama, haciendo que la habitación quedara completamente a oscuras.

— al fin. — el chino dijo con un falso tono molesto (porque claramente no podía enojarse con su amigo realmente) para luego acomodarse en su cama dispuesto a dormir plácidamente.

y de verdad iba a dormirse de no ser porque sintió un peso extra en su cama, unos brazos rodear su cintura y una respiración en su cuello.

— vé a tu cama, hanbin.

— ¿tanto te molesta que use mi celular?

— me molesta que lo uses a esta hora mientras intento dormir.

— mhmm, ¿sólo eso?

¿era sólo eso lo que realmente le molestaba?... por supuesto que no, era obvio que había otra razón.

— ¿con quién tanto hablabas? — soltó de repente y se volteó quedando frente a frente con el coreano.

— ¿celoso?

¿de verdad estaba celoso?... era obvio que sí, demasiado obvio.

— yo pregunté primero.

— bien, hablaba con chaehyun.

— ew.

— pienso que es muy bonita, tal vez tenga oportunidad con ella.

y aquí vamos de nuevo.

zhanghao conoce a hanbin más de lo que el propio hanbin se conoce a sí mismo, y el chino está más que seguro de que su querido amigo es de todo menos heterosexual.

y estaba claro que hanbin también lo sabía, pero por alguna razón seguía negándolo e intentando salir con cualquier chica que se le pasara por en frente.

— no digo que no sea bonita, pero, ¿enserio sigues con eso?

— ¿seguir con qué?

— seguir engañándote a ti mismo con el chiste de que te gustan las chicas.

— me gustan las chicas.

de repente una sonora carcajada se escuchó en la habitación, pues sí, zhanghao se le estaba riendo en la cara.

— sí claro, y yo odio tocar el violín.

— estoy hablando en serio, hao...

— ajá, como digas. ya vé a tu cama.

— ¿no quieres que duerma aquí?

honestamente, lo que más quería era dormir siendo abrazado por hanbin y despertar viendo el hermoso rostro contrario, era como despertar en el cielo viendo a un mismísimo ángel.

pero tristemente sus camas estaban hechas sólo para una persona, y no es que fuera imposible dormir entre dos en ellas, pero tampoco quería despertar con dolores corporales por dormir en una mala posición.

— no es eso, ya sabes lo que pasa si dormimos en la misma cama.

— un dolor de cuello no es nada. — dijo abrazando su cintura en un agarre aún más firme dejando en claro que no se iría.

— per-...

— pero nada, te duermes o te duermo.

al día siguiente, zhanghao no sólo despertó con dolor de cuello, sinó también con un terrible dolor de espalda. pero durmió siendo abrazado por hanbin, así que lo valía.

porque sí, su mejor amigo le gustaba, le gustaba demasiado.