• 🍓𖦹ָׁ besitos y galletas sabor a fresa 𔘓◞ th+jk

capítulo tres

domingo, ese día jungkook podía permitirse levantarse hasta tarde ya que su abuelo los fines de semana se encargaba del corralito de animales que tenían, así que a mediados de las 9am el omega se estaba despertando apenas, saludo con un beso a los alfas de su casa y salió con su toalla de baño para comenzar su rutina, ya después saldría al pueblo a reunirse con jimin solo para matar el día.

checo la temperatura del agua y estaba normal, al menos para el clima de esa hora el agua estaba refrescante, en su punto por lo cual comenzó a ducharse con tranquilidad como en toda la semana no lo hacía.

—moonlight sunrise, baby, come be my starlight, moonlight sunrise

cantaba el omeguita al mismo tiempo que enguaja su cuerpo del jabón, ya estaba terminando pero el agua estaba bastante buena que se quería quedar más tiempo, lastimosamente no pudo ser pues el alfa que últimamente le robaba los suspiros apareció enfrente de él, enrojeciendo de sobremanera al omega.

—¡no me mires! —se tapó con la toalla inmediatamente, aunque el alfa ya había visto todo.

—¡perdón, perdón! —había tardado en reaccionar pero se volteó cerrando los ojos.

estuvo mal que taehyung se hubiera quedado mirando al omega más tiempo, pero hay que entenderlo, el hermoso omega del pueblo estaba frente a él parado completamente desnudo, estaba muy mal que lo haya mirado de más, aunque en el fondo no se arrepentía de haberlo visto de más, porque no solamente era precioso de rostro, su cuerpo era una entera bendición, un deleite que no olvidaría y si de por sí el omeguita ya le había gustado, ahora estaba seguro que quería cortejarle.

—¿q-qué busca, taehyung? —se cubrió tanto que solo su rostro se asomaba fuera de la toalla.

—a tu-tu padre, cambio lo de vernos el lunes a hoy a esta hora —seguía de espaldas y con los ojos bien cerrados.

—espera afuera 5 minutos hasta que yo pueda entrar a mi casa, mi padre y abuelo pensarán cosas si yo entro así contigo

—si, ehm jungkook, discúlpame no fue mi intención en serio

—disculpa aceptada

el omega entró corriendo a su casa, ignorando a los alfas para llegar a su cuarto, realmente estaba tan avergonzado, el alfa que tanto le gustaba lo había visto desnudo y ni siquiera lo estan cortejando.

"¡de seguro pensará que soy fácil!"

"¡espera!"

"¿mi cuerpo se vería bonito?"

se quito la toalla echando un vistazo en el espejo de cuerpo completo que tenía, observándose completamente normal, no se veía raro y tampoco espectacular, aunque se podía ver la marcada silueta de su cintura pequeña y sus muslos gorditos, se sonrojó nuevamente al recordar como lo habían visto hace unos momentos.

"¿le habrá gustado mi cuerpo?"

sacudió su cabeza, ya estaba delirando con esos pensamientos para nada normales, mejor empezó a buscar ropa que lo haga resaltar su belleza ya que el alfa estaba afuera y hablaría con su padre por lo cual le llevaría una gran tarde en su casa, tenía que verse bonito todo el rato.

en el viejo armario que le pertenecía a su abuela, rebusco entre todos sus vestidos alguno que le gustará como le hacía ver la silueta ya que la mayoría eran vestidos normales, los alfas de su manada eran algo conservadores, no les gustaba que usará vestidos pegados o cortos ya que pensaban que eso era para omegas fáciles.

—este es perfecto —quitó del gancho un vestido lila de tirantes.

era el indicado ya que le quedaba un poco ceñido de las caderas, haciendo que su figura pareciera un reloj de arena, era un vestido normal de corte recto pero que por como se había desarrollado el omeguita ya no le quedaba igual a hace 4 años atrás.

arreglo su cabello ondulado cortito, peinando su fleco con delicadeza y arreglando su cabello azabache para que quedara uniforme, se puso unos brochecitos de moras para combinar con el vestido y se maquillo ligeramente, no tan cargado, al final se puso una camiseta blanca por debajo del vestido de tirantes y unas sandalias blancas con calcetas moradas con carita de gatito en la parte de los dedos.

se miró por última vez en el espejo, se había gustado como se veía, muy precioso. al salir a la sala encontró al alfa hablando con su padre y abuelo, los tres tomando café, cuando notaron la presencia del omega, taehyung no pudo evitar no mirarle de pies a cabeza, se veía muy bonito y ni hablar de como aquel vestido se pegaba a sus caderas, los bajos instintos del alfa kim querían arrancarle esa prenda para ver otra vez ese cuerpecito desnudo.

—kookie, ¿podrías traerle más café al alfa kim? —le preguntó su abuelo.

se acercó hasta donde estaba el alfa bronceado, el cual no apartaba su mirada de él, haciendo que se cohibiera.

—claro, permitame su vaso —mordió su labio del nerviosismo cuando sus manos se tocaron una vez más.

no sabía sí fue por los nervios o por la mirada intensa que estaba teniendo a sus espaldas, pues la taza vacía se resbalaron de sus manos quebrandose al momento del impacto, el omeguita quiso reparar el daño, agachandose rápidamente dándole una ligera vista al alfa kim de sus bragas rositas, aunque su vista fue obstruida por el padre el omega que alejó a jungkook de recoger los restos de la taza para que no se cortara, taehyung se sintió decepcionado de ya no ver más.

—voy por el recogedor y la escoba —dijo el abuelo jeon que se levantó para ir por lo mencionado.

—perdón —hablaba el omeguita con un tono lastimero.

—son accidentes, cariño, solamente no intentes recoger pedazos así con las manos, te puedes cortar

—no te sientas mal, jungkook, esto suele suceder a veces —se acercó el alfa al pequeño.

se sonrojó por la cercanía del alto, jungkook ya no sabía sí desfallecerse en sus brazos o besarle, cualquiera de las dos le gustaba y más si era algo que involucraba al alfa kim.

—ya, ya lo limpié —el abuelo jeon saco la basura y entonces regresaron a la pequeña sala de estar.

jungkook se sentó a lado se su padre, pues así podría tener de enfrente a taehyung al cual no le despegó la mirada, cada que hablaba con su padre sobre la casa que haría, él omeguita observaba los labios del alfa que refrescaba con su lengua.

taehyung se dio cuenta de cómo el omega le veía y se estaba sintiendo nervioso por ello, más por como se le ceñia el vestido de los muslos ya que estaba sentado, de su mente no se escapaba el recuerdo del sensual cuerpo sin ropa del pequeño, aún podía recordar sus rechonchitos muslos y el color de sus botoncitos que se le hacia agua a la boca por probar, su lobo estaba que quería tomar al omega solo para él.

—a más tardar la semana que viene ya empiezas con la construcción —el alfa kim asintió.

—si, al ya tener todo el terreno listo para empezar a construir ya es muy fácil lo demás

—ahí nos veremos en la semana, kim, cuídate muchacho —estrecharon sus manos.

—gracias, usted también cuídese, igual usted abuelo jeon, cuando quiera jugamos mahjong —el abuelo rió.

—adiós taehyung, ten un buen día —sonrió el omega, despidiendo al alfa con un beso en la mejilla.

—igualmente, koo —rozó intencionalmente su mano cerca de su muslo, haciendo suspirar al omeguita.

el alfa se retiró de la casa de los jeon y el omega se sentía completamente feliz, un poco confundido por las sensaciones que había tenido con la presencia del alfa, jamás en su vida se había sentido tan raro como una mirada o apenas un toque, ese alfa tenía algo que koo quería.