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capítulo diez| "¡Sólo respira!"
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POV de Il-ha
"¡No disparen!" Il-ha escuchó la orden del líder del pelotón.
"¡Alto el fuego!" Era demasiado tarde, alguien había disparado su arma de fuego.
Todos miraron hacia el sonido y encontraron a Ae-Seol que disparó, mientras disparaba a Mi-young, Hee-rak y Tae-man. Rápidamente se apartaron del camino. Hee-rak había empujado a Mi-young fuera del camino, haciéndolos tropezar. Si no fueran tan torpes y no se cayeran, ¿qué hubiera pasado?
"¡Ey!" Il-ha le gritó a Ae-Seol, mientras los otros estudiantes comenzaban a gritar.
"¡Hee-rak!" Il-ha gritó, antes de correr hacia su mejor amigo. Il-ha se arrodilló para asegurarse de que estaba bien, antes de moverse hacia Mi-young. Il-ha miró a Mi-young. Estaba temblando mientras las lágrimas rodaban por su rostro. Il-ha acercó la cara de Mi-young a sus manos.
"Estás bien. ¡Estás bien! ¡Respira!"
El resto de los estudiantes corrieron.
"Oye, ¿estás bien?"
"¡Estábamos preocupados por ti!"
"¿Dónde estabas?"
Mi-young se despertó cuando sus ojos se posaron en los de Il-ha.
"Lo lamento." Ella lloró.
Il-ha de repente jala a Mi-young a sus brazos. No le importaba si a ella no le gustaba o no. Estaba demasiado preocupado por ella.
Los estudiantes habían regresado a la escuela. Il-ha se paró junto a Mi-young mientras él tenía su brazo alrededor de su hombro. Él no iba a dejar su lado. Ella todavía estaba en estado de shock. Il-ha y el resto de la clase ignoraron las miradas que recibieron de las otras clases mientras caminaban mientras entrenaban.
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POV de Mi-young
La clase se sentó en silencio mientras ignoraban a las otras clases que los observaban desde la ventana. Desde que regresaron, todo lo que recibieron fueron miradas.
Un soldado había ahuyentado a los otros estudiantes por la ventana.
Mi-young apoyó la cabeza en su escritorio, mientras se escuchaban los gritos de los estudiantes. Algunos lloraron y otros se sentaron en silencio. Mi-young se enteró de que la Sra. Park había muerto mientras estaba en la tienda de conveniencia con Hee-rak y Tae-man. Su mente se dirigió a Il-ha. No pudo evitar pensar en él tirándola a sus brazos. Mi-young todavía tenía algún tipo de sentimientos hacia el chico, pero no pudo evitar odiarlo después de que él la abandonó.
"Esto no es un sueño en este momento, ¿verdad?" Soon-yi rompió los pensamientos de Mi-young.
