Mirada Constante. [BL]

C5 - C6

◦ ❈⚜❈ ◦

-「C5」-

Wu ShiJiu, que actuó como un niño sin ley, no tuvo que soportar esa golpiza, y la teoría de la conspiración que imaginó tampoco se hizo realidad: durante el fin de semana, cuando su madre llamó para saludarlo, Xu Xing respondió el teléfono y habló cortésmente, diciendo todas las cosas que a los mayores les gustaba escuchar.

—No te preocupes, tía. —Dijo. —Yo lo cuidaré.

En ese momento, Wu ShiJiu estaba recostado sobre el respaldo del sofá, escuchando astutamente a escondidas. Cuando terminó la llamada, Xu Xing dejó el teléfono en su mano, se puso de pie y se puso ropa para salir.

—Tengo un compromiso.

Fue al baño para mirarse en el espejo, examinando de cerca su propio rostro, luego miró la hora en su reloj de pulsera. —Regresaré un poco tarde.

—Oh. —Wu ShiJiu se puso de pie y lo vio ponerse los zapatos al costado del vestíbulo. —¿No vas a pasar la noche afuera?

Xu Xing puso su mano en el pomo de la puerta, pero se detuvo cuando escuchó eso. —¿Eh?

Pasó un tiempo antes de que reaccionara, estirando su brazo para envolver la cabeza de Wu ShiJiu. —¿En qué estás pensando, pequeño bastardo?

El pequeño bastardo no estaba convencido. —No puedes ser así, tío Xu, quiero decir... Tienes casi treinta años, ni siquiera puedes tener salud conjunta si no tienes pareja.

—Así que realmente puedes preocuparte por las cosas.

Las largas piernas de Xu Xing salieron por la puerta, pero giró la mitad de su cuerpo hacia atrás, las comisuras de sus labios se doblaron en una sonrisa que era diferente de esas sutilezas pasadas. —Preocúpate por tu tarea.

—No te enviaré fuera.

Wu ShiJiu regresó al segundo piso y trabajó en sus interminables exámenes con algunos fideos instantáneos y leche. Luego de terminar una materia, miró su reloj y repitió el proceso unas cuantas veces hasta que dieron las 12 en punto. Por lo general, esta era la hora en que se iba a dormir, pero hoy no se sentía tan cansado.

Salió del baño después de lavarse y escuchó el movimiento de alguien que bajaba las escaleras. Corrió hacia las escaleras y se agachó para mirar. Xu Xing acababa de entrar a la casa y los dos se encontraron cara a cara cuando levantó la cabeza.

—Yo.

—Estás de vuelta. —Llevaba una camiseta sin mangas y pantalones cortos, exponiendo sus brazos y pantorrillas delgados y fuertes mientras bajaba descuidadamente las escaleras. —¿Estás feliz?

—¿Por qué te preocupas por mis compromisos?

Xu Xing se quitó la ropa y la tiró en el cesto de la ropa, yendo directamente al sofá y sentándose en el medio. Wu ShiJiu fue a la cocina, se dirigió a la nevera por un refresco frío y descubrió que el hombre en realidad estaba perdido en sus pensamientos, algo raro de ver.

Lo pensó y tomó otra lata para dársela a Xu Xing, abriendo la tapa sin ayuda mientras caminaba para poder beberla cuando se la entregara. La única luz en la sala provenía de una lámpara de pie en una esquina, y la luz era muy tenue, por lo que apenas podía ver sombras y contornos, y mucho menos la cara del otro.

Podía ver vagamente que Xu Xing palmeaba el espacio vacío a su lado y decía: —Siéntate conmigo un rato.

—¿Qué pasa?

No tenía objeciones, solo tenía un poco de curiosidad. Después de hacer su pregunta, se sentó a su lado, ocupándose de sus propios asuntos, el refresco se balanceaba mientras se agitaba, burbujeando silenciosamente a través de la lata de aluminio.