Dos extraños bailando bajo la luna
Se convierten en amantes al compás
De esa extraña melodía, que algunos llaman destino
Y otros prefieren llamar, casualidadStiles se miraba en el espejo de la habitación, el traje blanco y el anillo brillando en su dedo anular, aun no podía creer que es un par de minutos estaría uniéndose al amor de su vida.
Noah entró a la habitación, y una sonrisa se instaló en su rostro y sus ojos se llenaron de lágrimas al verlo.
— Stiles...te ves...wow...tu madre estaría muy feliz de verte —Le dijo.
— Gracias, papá —
***...***
Talia entró a la habitación donde su hijo se encontraba esperando el ansiado momento desde hace seis meses.
— Te ves muy guapo, cariño —Le dijo con una sonrisa acercándose y dandole un abrazo — estoy muy orgullosa y feliz por ti, les deseo la mayor de las alegrías —
— Gracias mamá, no sabes lo feliz que estoy por casarme con Stiles —Respondío Derek.
***...***
La boda fue algo sencilla, tan solo con amigos cercanos y familias. El ojiverde se robo al novio, llevándolo al bosque, ese lugar donde se vieron por primera vez.
— Te amo Miecyzlaw Stilinski —Le dijo mirando sus hermosos ojos miel — amo haberte conocido, amo que estemos juntos —
— Te amo Derek Hale —Respondió con una sonrisa —...y agradezco al destino o la casualidad que te puso en mi camino —
— Eres mi más bonita casualidad que puso en mi camino el destino —
Sus labios se unieron en un beso donde se demostraban todo el amor que sentían el uno por el otro.