Perfect - Daerin

01

Y de nuevo estaba allí viéndose al espejo, preguntándose porque era tan jodidamente “Fea” y porque no era como las demás chicas.

— Hum... Estoy muy flaca, ¿Debería de comer más? Mi cabello es muy largo, ¿Debería cortarlo? Tengo muchas ojeras, ¿Debería tratar de dormir más? — Se decía Danielle a si misma viéndose una y otra vez al espejo, no lograba comprender porque no era como las demás, alguien tocó la puerta de su departamento y se vio obligada a abrir.

Sorprendentemente era su mejor amiga, — ¡Hola, Dani! ¿Cómo estás? Espero que mejor que la última vez que vine — Dijo con entusiasmo a la misma vez que pasaba al departamento de la mayor con unos pastelitos en las manos.

— Hola, Rinnie, estoy bien, ¿Y tú? — Contesto dándole un dulce abrazo y un beso en la mejilla.

— Bien, bien, te traje estos pastelitos para que te alegren el día, los hice yo — Los dejo en la mesita de Danielle y se sentó en el sillón junto a la contraria.

Pasaron un rato hablando de lo que les había pasado en un mes completo en el que no se habían visto, hasta que Haerin recordó la segunda cosa por la que fue a la casa de Dani.

—Oye Dani, te quería preguntar, ¿Puedo quedarme unos días en tu casa? Me corrieron de mi casa-...— Preguntó con vergüenza, no le había alcanzado para la renta de ese mes y su única salvación sería su mejor amiga. 

— Claro, te puedes quedar el tiempo que sea, para eso estamos las amigas — Sonrió dulcemente.

Llegó la noche y decidieron preparar algo juntas para la cena.

— ¿Te parece hacer café y hornear galletitas? —

Dijo con emoción, preparar algo con su "amiga" era muy especial para ella.

— Me parece perfecto, Hae — Sonrío.

Se la pasaron 2 horas haciendo las galletas y el café, al final les terminaron sobrando, seguían contando anécdotas mientras estaban sentadas en el sillón, Haerin se estaba quedando dormida, no aguantaba más, pero quería seguir escuchando a la chica que estaba enfrente suyo.

Después de unos minutos, Haerin quedó profundamente dormida, Danielle no sé había percatado de eso, pero cuando lo hizo la acostó a un lado suyo para después quedarse viéndola y admirando sus lindas facciones, sus ojos gatunos tan atractivos, sus labios rosados, su nariz perfecta, su cabello y cuerpo perfectos la atraían cada día más, tenía un profundo miedo de confesarle que estaba profundamente enamorada de ella, pensaba que la iba a rechazar y se iba a arruinar su amistad, prefería morir antes que confesarselo. Suponía que Haerin no sentía lo mismo que ella, Danielle se sentía como una escoria, y no solo se sentía, lo era, en cambio Haerin era la perfección en persona, ¿Cómo no amarla? Era una ternurita.

Después de dejar un dulce y tierno beso en la frente de Haerin, se acostó junto a ella, terminaron durmiendo abrazadas, una encima de la otra, una poción bastante... Rara. Se levantaron un poco tarde y con dolor de cuerpo, en definitiva no era buena decisión dormir así.