5. 𝓟𝓪𝓼𝓪𝓭𝓸 𝓹𝓽1

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Tzuyu entró a la cocina en busca de jugo de naranja, y mientras lo servía a alguien se le ocurrió golpear histérico la puerta de su casa, se asustó un poco pero lo suficiente para tirar algo del juego, no tuvo el tiempo de limpiar por ir a ver quién era el loco que tocaba de esa forma. Apenas abrió la puerta y su cuerpo fue rodeado por los brazos de su novia la cual lloraba desconsoladamente.
               
—¿ShuShu?¿Que pasa?¿Estás bien?— La castaña negó sin dejar de llorar—¿Que ocurre, ShuShu
               
—M-mis papás están m-muy enojados c-conmigo— Balbuceó y sollozo con fuerza.
                 
—¿Por qué?— La alejó de un poco para poder acariciar sus mejillas—¿Que paso con tus papás?
                  
Entraron a su casa porque Tzuyu no pensaba dejar que su novia la cual lloraba y temblaba asustada se quedará de pie contándole sus problemas, primero la calmaría y después volvería a preguntarle. Tardó demasiado para que ShuHua pudiera estar un poco más tranquila a como llegó, no podía imaginar que tipo de problema pudo tener con sus padres como para que hubiera llorado de esa forma, pero esperaba poder ayudarla aunque fuera un poco.
                   
—¿Mejor?— ShuHua asintió lentamente—¿Que paso?
                  
—Se enteraron que estoy embarazada— Soltó sin pensarlo.



                   
Tzuyu quedó atónita al escuchar a su novia, ¿Había escuchado bien?¿Su novia estaba embarazada? Eso no podía ser posible ¿O sí? No por supuesto que no.
                  
—Eso no es posible— Murmuró.
                 
—Pues lo es, llevo semanas sintiéndome mal, creí que no era nada, pero empeoró y mi mamá se preocupo así que me llevo a revisar ¿Y que crees? Estoy embarazada— Tzuyu fruncio el ceño, eso no podía ser cierto.
                
—¿Lo sabías?¿Sabías que podías quedar así?— El menor alzó una cceja
                
—Sí Tzuyu, lo sabía y no te dije porque quería tener un hijo en este momento de mi vida y arruinar todos mis malditos planes— La pelinegra rodó los ojos— Claro que no lo sabía, si lo hubiera sabido te lo habría dicho... ¡Mierda, Tzuyu!
                   
—A no, yo no tengo toda la culpa.
                   
—¿Quien no utilizo condón?— Alzo sus cejas para que le respondiera— Fuiste tú quien lo olvido.
                
—Pero tampoco fuiste para recordarmelo ¿O sí?— La menor bufo molesta.
                 
—¡Yo no queria un hijo en estos momentos!— Reclamo.
                
—¿Y yo sí? Por supuesto que no, no lo quería hasta por lo menos acabar la universidad.

                  
—¿Y entonces?
                
—Bien, si peleabamos no llegaremos a algo así que tú toma la decisión ¿Lo quieres tener? No importa lo que digas yo estaré de acuerdo— ShuHua la miro sin saber que responder— No estaba en tus planes, ni en los míos, si decides no tenerlo yo estaré de acuerdo— Acunó su rostro.

                   
—Es que sí, yo no quería un embarazo ahora, pero no sé si sea capaz de abortar— Abulto sus labios— ¿En verdad estarás bien con la decisión que tome?
                  
—Por supuesto ShuHuagie, respetaré tu decisión— Le sonrió cálidamente.
                 
—No seré capaz de abortar— Murmuró, Tzuyu asintió— Creo que deberíamos tenerlo.
                   
—¿Estás completamente segura?— ShuHua asintió sin duda alguna— Entonces lo tendremos y por el nos esforzaremos para cumplir los planes que tenemos— Tomo sus mejillas y dejo un tierno beso en sus labios.
                
—Pero mis papás no me quieren ver— Informó.
                  
—Tranquila, te puedes quedar aquí, seguro que mis papás no lo tomarán tan mal como los tuyos— Acarició sus mejillas— Todo estará bien ShuHuagie.



                           
        
               
—Eres la mejor Chewy— La abrazo con fuerza, al menos no lo tomo mal.

Esa tarde cuando llegaron los padres de Tzuyu les contaron de la situación en la que se encontraban, su primera reacción no fue felicitarlo, pero tampoco les dieron la espalda, ShuHua se sintió tranquila cuando escuchó como los padres de su novia no la corrieron de la casa y en su lugar se preocuparon por ella.

En su momento ShuHua creyó que tomo la mejor decisión, pero conforme pasaban las semanas se empezó a irritar por las náuseas y mareos, no podía dormir bien y estaba demasiado cansada como para prestar atención a sus clases, aunque Tzuyu en casa la apoyaba, para cuando reaccionó ya no había marcha atrás, ya había cumplido cinco meses de embarazo.

—¡Tzuyu!— La mayor dejo de prestarle atención a su compañera con la cual se ponía de acuerdo para un trabajo que tenían que hacer, se disculpó con ella y fue a ver qué necesitaba su novia.

—¿Sucede algo, ShuHuagie?— Le preguntó ciertamente preocupada.

—Sucede de todo, estoy engordando, me están saliendo estrías, ya no puedo dormir cómodamente, estoy cansada, tengo demasiada hambre y muchas cosas más, pero tú estás allá no esa sonriendole y quién sabe que más.

—Te recuerdo que tengo que hacer un proyecto con ella, nos estábamos poniendo de acuerdo— ShuHua puso sus ojos en blanco—¿Quieres comer?

—Quiero no estar gorda, eso quiero, ¿Pero adivina? No se puede porque cargo con tu hija— La expresión de Tzuyu endureció, desde que su vientre comenzó a ser notable le decía lo mismo, que estaba gorda por tener que cargar a su hija.

—¿Vas de nuevo?

—Es la verdad, por cargar a tu hija yo tengo que estar gorda— La mayor no quería perder la paciencia pero ShuHua llegaba a ser tan insoportable que su paciencia siempre amenazaba con desaparecer.

—Te recuerdo que la decisión de tenerla no fue mía, tú elegiste que debíamos hacernos cargo y yo te apoye, igual si hubieras decidido no tenerla— La castaño se le quedó mirando con cierto fastidio.

—Me dejaste tomar la decisión sola...

—Por supuesto, porque si yo tomaba la decisión creerías que no me importaría lo que tú pensarás, así que te deje a tí porque después de todo eras tú quien la tenía— ShuHua bufo— Así que no me culpes de la decisión que tomaste.

—Idiota, eso eres— La empujó y salió del salón de clases.

Tzuyu pasó su mano derecha por su cabello y fue a detrás de su novia, no estaban para discusiones.

—ShuHua— Tomo el brazo derecho de su novia para que se detuviera y poder abrazarla.

—Me siento frustrada, estresada y muy cansada, se vienen los exámenes y siento que es demasiado— Sollozo con su rostro en el pecho de la mayor.

Lograron arreglar las cosas ese día, pero las discusiones empeoraron después de que sus exámenes pasarán, ShuHua se irritaba con cualquier mínima cosa y no quería saber nada acerca de bebés ni nada que estuviera relacionado, esperaba el momento en que la bebé naciera para poder volver a la normalidad.

—¡Eres un egoísta!— Bramó ShuHua— ¡Piensas en ti!¡Siempre en ti!¡¿Yo dónde quedó?!

—¡Me preocupo por ti todos los malditos días desde que me dijiste que estabas embarazada!¡Aquí el único egoísta eres tú!¡Vamos dime qué no querías tener a nuestra hija!

—¡Pues no! No quería tenerla pero no tenía la valentía de abortar, pensé que podría con esto, pero no, estoy deseando que nazca para volver a la normalidad— Tzuyu alzo una ceja.

—¿Normalidad? ShuHua vamos a tener una hija, nada será como antes.

En ese momento al mirarse descubrieron que su relación ya no iba a prosperar, Tzuyu no culpaba a la bebé ¿Ella que culpa tenía? Las únicas culpables eran ShuHua y ella, pero ShuHua si culpaba a la bebé, por ella su relación estaba por acabar.
Quería que todo se acabará pronto ya no quería sentirla, necesitaba ya no sentirla dentro de ella, no quería saber nada de ella.

Los siguientes meses fue demasiado para ambas, ShuHua ya no se preocupaba por cuidarse y Tzuyu trataba de ayudarla por su hija, no quería que nada le pasará, por los descuidos de ShuHua el nacimiento de la bebé se adelantó un mes, fue frustante para Tzuyu, si había tenido muchos problemas con ShuHua pero no quería que nada le pasará y menos a su hija.
Cuando le dijeron que ambas estaban fuera de peligro su alma volvió a su cuerpo, le dijeron que tenía que  esperar unas horas para poder verlas y ella no tuvo problemas con esperar. Pero cuando le hablaron fue para decirle que ShuHua se negaba a verla a la bebé, así que ella sin problemas se encargó de ella, cuando la conoció no evito derramar lágrimas era la bebé más linda que había conocido.

—Ya le dije a todos que no me interesa conocer a la bebé— Tzuyu negó.

—ShuHua...

—¡No quiero saber de ella!

Tzuyu no insistió, salió de la habitación porque ella si deseaba estar a lado de su bebé, a parte de que todavía tenía que pensar en un nombre, en todos esos meses no se puso a pensar en alguna. Quizás no sabía nada sobre bebés, pero su madre se ofreció a ayudarle en todo y él estaba agradecido, iba a aprender todo lo necesario, se esforzaría en todo para que su hija estuviera bien.

—Hyunjin— Murmuró. Su madre la miro— Así se llamará.

—Es un lindo nombre— Tzuyu sonrió.

—Jovencita Chou— La pelinegra volteó a la enfermera—¿Puede venir?— Tzuyu miro a su madre y después a la enfermera.

—Ya vuelvo— Le entrego a su hija y se fue junto a la enfermera—¿Le pasó algo a ShuHua?— La mujer lo miró con una extraña mueca.

—Su novia no está en su habitación— Tzuyu abrió los ojos con gran sorpresa—Ya la están buscando.

—Pero ¿Cómo?— La mujer se encogió de hombros.

—Le avisaremos si lo encontramos— Tzuyu asintió y volvió con su madre e hija.

—¿Que paso con ShuHua?

—Se escapó, la están buscando, sabía que le causaba mucho conflicto, pero no creí que se iría de esta forma— Murmuró dolida.

—Quizas lo encuentren— Trato de reconfortarla.

Pero no, ShuHua no apareció, ni en el hospital, ni en la casa, se fue sin aviso alguno, sin importarle que su hija la necesitaría. Una rabia la invadió y tiro todo lo que le pertenecía no dejó nada que fuera de ella, si quería desaparecer de su vida pues bien, ShuHua no existiría para su hija pues lo sabía se fue por ella, ni ella ni mucho menos su hija necesitaban de ShuHua. La rabia fue reemplazada por el llanto pero no podía volverse débil en ese momento, lloro lo que tenía que llorar y después se levantó para hacerse cargo de su hija.

Hyunjin la necesita a ella, se esforzaría por ella haría todo para que no le faltará nada, se desviviria por ella y nada sería más importante que ella.






𝐌𝐚𝐦á, ¿𝐄𝐬𝐭á𝐬 𝐞𝐧𝐚𝐦𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora