Capítulo 4.

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- Lo siento, no sabía eso y no pregunté, dejaré la habitación tal y cómo está, solo pintare el techo otra vez de blanco- me di la vuelta para ocultar mis nervios

G - No te preocupes, a mi madre le encantaba pintar, de echo está habitación sufrió mucho pero es la primera vez que la vemos de otro color que no sea claro -

- No quiero arruinar sus recuerdos, amo pintar pero puedo dejarlo si desean - sentí unas manos grandes en mis hombros, me daban la vuelta y me abrazo ¿otro abrazo? Mi mente daba demasiadas vueltas, enserio era demasiado ya

A- A mi mamá seguro le agradarías - sentí cómo sus manos apretaban más mi espalda y empecé a temblar, era la primera vez que sentía algo así, entonces puse mis manos en sus hombros y lo aleje solo reí

G - Expresate en la pintura que haras, será perfecta - ya no sabía que decir, entonces solo asentí y le agradecía a Dios que Esmeralda entrara con las bebidas, seguimos pintando, el techo quedó totalmente de negroazulado y un poco de las orillas de las paredes, revolvi la pintura azul con un poco de negro y empezaría la degradación, enserio estaba feliz, estaba quedando cómo quería el degradado azul en la primera pared estaba quedando perfecto, pero en eso mi madre apareció

- Que lindo te esta quedando hija-

- Gracias, he tenido ayuda -

- Vamos a comer, cámbiate- sin más que decir se fue

Me acerque a mi valija para sacar ropa pero cuando la estaba abriendo me di cuenta que mi shampo había explotado, ¿por qué? no se

- ¡GENIAL! - Grite con furia, no tenía más ropa que la de esa maleta

G - ¿Qué pasó? - se acerco a ver y solo se quería reír

A - No puede ser, lo bueno es que no es pintura -

- Solo esta ropa tengo, no tengo nada más que ponerme, todo está manchado y si mi madre me mira así me matará - me queje mientras pasaba mi mano en mi pelo

E - Yo le prestaría algo pero el Señor Rafael se enojaria conmigo y me regañaria - dijo con un tono de preocupación

A - No se preocupen más, yo le prestare una camisa - solo asentí mientras revisaba la ropa

- Gracias al Cielo, este pantalón se salvo - un pantalón negro con detalles dorados

A - Entonces vamos a nuestro cuarto - empezaba a caminar y lo seguí tomando mi pantalón un cinturón y ropa interior, estaba algo confundida pero no dije nada

Esmeralda se había ido a cambiar, para ir a la cocina, solo seguí a Angel y dos puertas después entro, entre detrás de él y vi dos camas, ahora entendía, Angel y Gabriel comparten cuarto, tiene lógica para mi.

G- Me iré a lavar y a cambiar mientras buscan la camisa - solo vi como entraba a una puerta que parecía el closet, salía de ahí para entrar en lo que supuse era el baño

A - Vamos - solo lo seguí en donde Gabriel había entrado primero.

Me quede sorprendida con la cantidad de ropa que tenían ahí, tenían casi todo repetido desde zapatos, hasta las camisas.

- Mira esta - me extendió una camisa Roja degradada a negro, enserio eran grande sus camisas - O está - dijo sacando una camisa Celeste

- Veo que no tienes muchos colores oscuros- aunque intentaba ignorar el hecho la camisa rojo con negro era de las pocas cosas oscuras que habían, incluso en los zapatos

- A mi madre casi no le gustaban las cosas oscuras, decía que se sentía triste, de echo está camisa me la regalo una amiga pero casi nunca la uso - Ya se que camisa usar, si me la ofrecía era por algo

De la ciudad a un pueblo ¿que puede pasar?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora