Una Inusual Descendencia.

Amor y preocupación

*Pov Adamas*

Después de aquella reunion donde hablamos del impostor de Hades comencé a vivir en el Olimpo con mis hijos, incluso le pedí a Zeus  que no fuéramos molestados por otros dioses pero ¿Creen que Zeus me hizo caso? ¡Por supuesto que no!

Zeus dejo que múltiples dioses me visitaran solamente para sacarme información sobre Eleos y mi tipo de relacion con Odín por la reciente separación con su esposa.  En verdad que era muy jodido, debido que ahora era el foco de atención de muchos rumores y chismes de los demás dioses.

Muchos dioses venían a mi, escudándose con el hecho de que Eleos seria el primer dios perteneciente a "dos panteones", viéndolo como una especie de alianza, cosa que me molestaba bastante, mi hijo no era el objeto de una alianza, era producto de mi relacion que existió entre Odín y yo... Pero no les daría el gusto de saber tal dato, por ende se limitaba a contestar de forma breve sin dar detalles y en el peor de los casos lo sacaba a paradas de mi residencia.

Sobre el tema del divorcio de Odín, me ha dejado pensando mucho en especial por las interacciones que he tenido con él últimamente... Cuando ambos éramos amantes él me hablaba mucho de separarse de su esposa y estar conmigo todo el tiempo. Siendo sincero nunca le creí tal cosa pero esta situación en verdad que me ponía muy ansioso el solo pensar que en verdad Odín se había divorciado y que él deseará estar conmigo me ponía los pelos de punta, pero solo tal vez estaba fantaseando tal situación, después de todo había pasado tanto tiempo sin vernos ni saber del otro pero incluso ahora el tenerlo cerca me hace sentir cosas pero decidí reprimir esos sentimientos y no hacerme ideas tontas...

Después de un tedioso día llego la noche a la que por fin logramos ingresar de nuevo nuestra residencia ya que fue remodelada por Hefesto a petición de Zeus, la cual duro unos días, por suerte nos quedamos en la residencia de Hestia en lo que mi residencia era remodelada. Al ingresar mis hijas estaban maravilladas con esta a lo que decidieron observar la residencia junto a Hefesto él cual parecía encantado y feliz alrededor de ellas, ciertamente no me agrada que alguien esta tan cerca de mis hijas, al menos era Hefesto y no Apolo o Dionisio,  sin dudarlo Hefesto las guío a ver las remodelaciones de la residencia.

Sin embargo me quedaría en la cubierta de mi residencia-barco observando el paisaje, pero sobretodo a lo lejos de las nubes  el mundo mortal, a pesar de participar en guerras destructivas en realidad me agradaba observar el mundo mortal, sin mencionar que el nuevo estilo de la residencia no es de mi agrado pero al menos le gustaba a sus hijas y eso me mantiene tranquilo. Pero comencé a escuchar unos aleteos a lo lejos, levante la mirada y logré divisar a dos aves, eran nada mas ni nada menos que Munin y Hungin.

— Cuervos molestos... ¿Qué hacen aquí? —pregunte mientras miraba confundido.

— Señor Adamas... Le hemos... traído unos presentes —menciono Hungin cansado mientras ambos cuervos con sus patas le dieron los supuestos presentes al dios.

— De parte del Señor Odín... solo para usted —menciono Munin mientras este le entrego un sobre.

Observe con curiosidad ambas cosas, antes de que intentara hablar con los cuervos me percate que ambos se habían alejado rápidamente, mientras escuchaba como peleaban entre ellos. Mira detenidamente el obsequio para comenzar a desenvolverlo encontrándome con un bello brazalete de oro pulido que llevaba grabado mi nombre pero mi atención se dirigió al sobre el cual abrí en ese preciso momento encontrándome con un... poema?

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*Poema*

Te quiero mansamente, entre las sombras de las falsas ilusiones.

Te quiero como para leerte cada noche, como mi libro favorito quiero leerte, línea tras línea, letra por letra, espacio por espacio.