Capítulo 1: El tiempo siempre juega contra mí.

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Victoria siempre tuvo historias que contar.

A sus cinco años de edad, ella vivió un suceso extraordinario, o "paranormal" como dirían algunos. Después de vivirlo, no le tomo tanta importancia. Al paso del tiempo, ella se convenció a sí misma de que era solo un sueño.

Al día de hoy, ella sabe perfectamente que todo fue real.

03 de julio del 2007, 9:11 PM:

Con sus piernas inquietas balanceando en el sillón, ella encontraba inmersa en un mundo fantástico de su caricatura favorita de la niñez.
Dentro de su inocencia y constantes fantasías, cuando ella aún creía en la magia, en seres sobrenaturales y experiencias extraordinarias, creía que, si lo deseaba lo suficiente, ella se podría encontrar en ese mundo.
Ese día nunca llegó, y eventualmente, dejo de creer en la magia.

Dejo de ser una niña dulce, artística y soñadora nata, para convertirse en una adolescente depresiva, enojada con el mundo. Resentida ante sus circunstancias.

Esclava del sistema, cuyas decisiones de vida se basaban en hacer lo que le aconsejara la gente mayor. Si vida constaba de constantes subidas y bajadas.

Cuando quería salir de su mundo tan incierto, ella comenzaba a cuestionarse con su cerebro fantasioso que resurgía de las cenizas cosas como:

¿Habrá algo más allá?
¿Esto es todo lo qué hay?

Para luego convencerse de que, tales ideas solo eran autoengaño en un intento de escapar su miserable vida. Cada vez, caía en el hoyo de nuevo. Estancada.
Su cerebro le convencía de que estaba haciendo lo correcto, lo que todos los demás hacían.

Con el paso del tiempo, ella pudo controlar su depresión y se convirtió en alguien estable. Aburrida, con tendencias alcohólicas, pero al menos tenía su "vida resuelta".

Hasta que ella cambió de opinión, liberándose de sus cadenas, convirtiéndose en su auténtico ser. Regresando a sus raíces.

— Es tarde para ver televisión, vamos a la cama mi cielo.— le ordeno Luisa, su madre con tono dulce y con sus ojos cansados, de tanto laborar en el hospital.

Ella decidió hacerle caso y prepararse para dormir.
Ella, tan cálida a pesar de todo, le dio las buenas noches, pero antes de que cerrara la puerta, Victoria se atrevió a preguntar:

—Ya será la última vez que tú y papá pelean, ¿verdad mami? — Le pregunto con gran inocencia y esperanza, mientras ella asintió y le dio una sonrisa, después, cerró la puerta.

Con el sonido de los grillos, comenzó a arrullarse y rápidamente concilio el sueño.

De repente, el sonido de algo que parecía la televisión se estrelló contra la pared, se escucharon gritos, gemidos y cosas romperse una y otra vez.

Era una pelea constante entre sus padres, en la que, claramente, iba perdiendo Luisa.
Sin dudarlo se levantó de la cama, corrió hasta el comedor, y con toda la fuerza de su cuerpo pequeño le permitió, trato de empujar a su padre.

—¡Déjala! — chillo en repetidas ocasiones

Su padre volteó a verla con ira. Por un momento, ella pensó que la golpearía. Después, de un momento a otro, todo se detuvo.

Y en un parpadeo, ella estaba recorriendo los canales de televisión nuevamente, y al notarlo, se detuvo a ver el reloj; 9:11 pm.

Su capacidad limitada de distinguir la realidad hizo que actuara con normalidad, pero en ese momento sabía que tenía que evitar la futura pelea de sus padres.

Typical sad Pisces (RTS vol 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora