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Harry era uno de los pocos cambia formas del cardumen, por lo que fue designado al grupo de tierra en cuanto el hijo del dios Del Mar salió del agua.

—Ayuden a quienes puedan, pero sobre todo mantengan un ojo sobre Percy. Los problemas siempre parecen encontrarlo y lo quiero vivo.

Harry asintió y por primera vez desde que había llegado se sintió útil, sus poderes de mago no tenían cabida en el mar, ¿pero en la tierra? Era perfecto.

Se aseguró de estar cerca de la entrada al Olimpo, su señor había pedido claramente que su hijo fuese protegido, en el apogeo de la guerra todos eran posibles víctimas pero haría lo posible por mantener al joven a salvo.

Por lo que sabía, el joven cumpliría dieciséis en unos días, cumpliendo la profecía que lo rodeaba (o tal vez no).

La profecía que rodeaba a Harry se había cumplido hace no mucho, Harry podía simpatizar con el joven semidiós.

Pasaron los días, hasta la batalla propiamente dicha, Harry blandía su espada y su varita con destreza, atendió a los heridos pero no todos pudieron salvarse.

Harry respaldó al joven semidiós con sus hechizos, los mugg- mortales seguían durmiendo en todos lados, una barrera protectora rodeaba el Empire State.

Percy subió junto a sus dos amigos y la hija de Zeus, sin embargo, Harry no dio por terminado su labor.

Esperaba que Percy estuviera a salvo ahí arriba.

The sea (where we belong) [HP/PJO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora