Yes, I want

Ella me odia

POV _________:

Bajé las escaleras secándome las lágrimas con la manga de mi camisa. Me dolía mucho lo que había pasado, no lo iba a negar.

La conexión que tenía con Tom era algo que no podía explicar, he tenido muchas cosas con diferentes personas, pero nadie me había hecho sentir así.

Era el único que lograba calmar a la "_________ borde" y hacia sacar su lado "cariñoso" o "amable".

Me sentía segura cuando estaba con él, me complementaba, pero a veces lo pienso de otra forma y no sé, tal vez solo me parece atractivo e intento que pase algo bonito entre nosotros pero probablemente él solo me vea como una amiga.

Llegué a la planta de abajo.

- ¿Qué te pasa ________?, ¿te encuentras bien?. - Preguntó Gustav preocupado.

Solté una risa fingida. - Sí tranquilo, es solo que tengo una cosa en el ojo y por eso me llora. - Comenté mientras me frotaba los ojos. Es la peor excusa que podía poner pero en ese momento no podía pensar en otra cosa.

- Ahh, claro. - Respondió Gustav no tan convencido.

Bajó Tom intentando no enseñar los ojos bajándose mucho la visera de la gorra y frotándose la cara con las manos.

Agarré un par de cajas y subí las escaleras.

- ¿Qué tal tío?, ¿qué ha pasado?. - Preguntó Georg. Les escuchaba desde arriba, una puerta se había cerrado por dejar una ventana abierta y se pensaban que yo me había metido a la habitación. Dejé la caja dentro de la habitación sin hacer ruido y me quedé arriba apoyada a una pared escuchando.

- No quiero hablar. - Respondió Tom.

- Venga Tom, cuéntanos. - Anunció Gustav.

Escuché cómo sacó aire por la boca. - Le he dicho que le quería explicar lo que había pasado con Ashley pero no me ha querido escuchar, decía que prefería estar solo conmigo por la banda pero que fuera de eso no quería que hablásemos. - Comentó Tom con la voz entrecortada.

- ¿Qué?, ¿y no la has retenido como te dijimos?. - Preguntó Gustav.

No hubo respuesta.

- Entonces si no quiere hablar contigo y tú tampoco la retuviste para que te escuchara, ¿cómo esperas que sepa que lo de Ashley fue solo de una noche pero que ella está loca y se pensó que érais novios?, ¿por arte de magia?, ¿una paloma mensajera?, ¿por un sueño?, ¿por señas?. ¡Eso es lo que le tenías que haber explicado! - Contestó Bill un poco enfadado.

¿Cómo que ella se pensó que eran novios?. He de decir que eso también me pasó con un chico hace unos seis meses.
Tuve un lío con uno un poco más mayor que yo, que me esperó fuera del club al que iba antes, hablamos un rato y tuvimos un rollo de una noche.
Al día siguiente se presentó de nuevo en el club y me espantó al chico con el que estaba a punto de irme a su casa.
Le pregunté que qué hacía, que si había entendido que él y yo éramos novios por lo que pasó la noche anterior lo sentía mucho, pero que no lo somos.
Tal vez le haya pasado lo mismo a Tom, espero.

- No lo sé Bill, pero tampoco quería forzarla a que me escuchase. - Respondió el chico de rastas.

- Vale Tom, pero tienes que hacer algo, un día de estos la sientas en tu cama, te sientas a su lado, la miras a los ojos y le dices, "mira _________, Ashley, la chica del otro día, no es mi novia. Una vez tuvimos un rollo de una noche y se ha creído que ahora es mi pareja o algo así, intenté explicártelo pero te fuiste antes de que pudiera decir nada. Yo ya le he dejado las cosas muy claras a ella y se fue enfadada cuando se lo dije.", y si quieres ahí le confiesas tu amor por ella y ya está. - Comentó Georg.