Tres meses.

Capítulo 9

Cuando me levanté por la mañana me olvidé de todo el problema que pasó en está casa, salí de la habitación y fui directo a la cocina, tenía mi cargador en una mano y en la otra mi móvil, como había enchufes en la cocina decidí cargarlo ahí.

Con muchas ganas preparé un desayuno muy bueno. 

De repente  escucho a alguien bajar.

– Oh, Sophie has preparado el desayuno, que detalle –dijo Anastasia.

Por que yo en ningún momento la llamaré señora Anastasia, me niego, no puedo.

Admite que no podrías porque te entraría la risa.

Vale si, lo admito.

– Emm…

–  Está muy bueno, a partir de ahora tú harás junto a Megan el desayuno, ¿te parece? –me corta

¿Qué?, no ¿por qué? 

– Pero…

– Bien, nada de peros.

– A…

Escuché pasos dirigiéndose hacía nosotras.

– Hija, ¿cómo te lo pasaste anoche?

Y ahí estaba él, con el pelo desordenado y mojado, con una camiseta azul marino básica ceñida al cuerpo y unos pantalones negros que le quedaban tan bien.

Que guapo

– Sophiee.

Anastasia me sacó de mis casillas y pude contemplar que las dos me estaban mirando con cara extrañada mientras que el chico estaba tomando un vaso de agua.

– ¿Qué?

– Que, ¿qué vas a estudiar? –preguntó la joven.

– Voy a estudiar psicología en…

– En la universidad en al lado de mi carrera, lo sé.

La joven me sonrió y me miró de arriba a abajo mientras Anastasia caminaba hacía el chico y le decía algo al oído, cuando terminó el chico se levantó y fue con ella a la terraza así que nos quedamos ella y yo en la cocina.

– Bueno mi madre me ha dicho que el desayuno ha estado estupendo, ¿sabes cocinar, no?

– Bueno…

– Supongo que si, mi madre ha pensado en que tu y Megan hariais un buen equipo haciendo la comida. –dice señalándome con el dedo.

– Ya pero…

– ¿Por qué escogiste venir aquí?

– Porque aquí es donde enseñan mejor psicología, para ser la mejor.

– O sea que en tu país no son buenas las universidades.

– Si, pero…

– Pero no psicología y por eso tener que gastar dinero, es interesante pero la mía tendrá más éxito.

– ¿Por qué, cual haces?

– Interpretación. – dice dando una vuelta haciendo lucir su melena. – te abre las puertas a conocer nuevos lugares y personas famosas, es mi sueño.

Sarah va vestida con unos pantalones cortos azules y con un top rosa, es la típica barbie con el pelo rubio y ojos azules con un cuerpo perfecto con toda una vida por delante, la típica que intenta destruir a los demás con palabras, pero eso conmigo no va a pasar.

Mientras sube las escaleras a su habitación yo voy directo a la mía.

Estaba hablando con mi hermano cuando escuché unos golpecitos a la puerta.