El destino de las flores

¿Tú, yo y ella?

El sol ardiente se alzaba sobre la Aldea de la Arena, sumiendo todo en un resplandor dorado. En lo alto de la torre del Kazekage, Gaara del Desierto observaba con ojos serenos el panorama del pueblo que había jurado proteger. Pero bajo su fachada de líder fuerte y decidido, ocultaba un secreto que solo unos pocos conocían, un secreto que ahora lo atormentaba...¿Cómo se lo diría? ¿Se molestará? No, no, claro que no... ésto es solo un pacto entre aldeas, los sentimientos salen sobrando cierto...¿Cierto Sakura?

Matsuri, una joven kunoichi talentosa de la Aldea de la Arena, se encontraba en su pequeño apartamento, ajustando su atuendo. Su mirada se posó en una fotografía que yacía en su mesita de noche, una imagen de ella junto a Gaara. Nadie en la aldea sabía de su relación con el Kazekage, una relación que se mantenía en las sombras desde hacía años.

En la otra punta de la aldea, en el Hospital, Sakura Haruno, la prometida de Gaara por un pacto entre aldeas, estaba ocupada revisando sus notas médicas. Desde su llegada, había trabajado incansablemente para mejorar la atención médica en la Aldea de la Arena, cumpliendo con su deber como médico ninja y futura esposa del Kazekage.

Sin embargo, las sospechas comenzaron a agitarse en él interior de Sakura, y no podía ignorar los murmullos que circulaban por la aldea. Todos parecían saber algo que ella desconocía o simplemente no quería aceptar.

Un día, mientras caminaba por el mercado de la aldea, Sakura se cruzó con Kankuro. No pudo evitar preguntar: "Kankuro, últimamente he notado que por la aldea hay murmullos, no bien intencionados".

Kankuro, sin poder mirarla a los ojos, respondió: "Sakura, deberías hablar con Gaara sobre eso. No estoy autorizado para revelar sus asuntos personales, se a que te refieres, sin embargo no puedo ayudarte, sabes que tienes mi agradecimiento de por vida pero en está ocasión no soy de utilidad".

La inquietud de Sakura creció, mientras veía como Kankuro caminaba apresurado en medio de la multitud.
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Gaara al principio no dije nada, no quería causar más problemas de los que había, pero a pasado un tiempo y hay algo que debo decirte, deja tu romance o lo que sea que tengas con Matsuri.

Sakura es la mujer que salvó mi vida, y estaré eternamente agradecido con ella, por eso mismo no puedo soportar que hagas esto bajo sus narices.

Además este compromiso no es bien recibido por Sakura y aún así está aquí, y eso hace que me sienta aún peor. Ella no merece sufrir más, es suficiente castigo estar aquí por culpa tuya y de lo que sigues haciendo con Matsuri.

Todo ésto es culpa de tu amorío con esa mujer, y todos los sabemos, todos excepto ella.

El sufrimiento de Sakura se debe a tu aventura y ella está aquí para remediar tu reputación a costa de su vida y felicidad sin saberlo. Almenos honra su estadía, y deja de frecuentar a Matsuri.

Sakura es una mujer grandiosa en todos los sentidos. Y por todo el respeto que se merece te pido por favor Gaara que te alejes de Matsuri. —sentencio Kankuro mirando con frialdad a su hermano, dejando así a un Gaara estupefacto.

Vaya, pareciera como si a tí te gustará Sakura más a que a mí, Kankuro...—murmuro el pelirrojo mientras miraba a su hermano detenidamente.

Aah......no era necesaria aquella reprimenda, yo se lo que debo hacer. Siempre lo supe, y ahora que puedo tenerla no la dejaré ir, pero tampoco la obligare a qué me amé....—replico el pelirrojo con aires de grandeza.

Sabes muy bien las dificultades que estamos atravesando, hay problemas detras de estás murallas, y no estamos fuera de su blanco Gaara, tarde o temprano tendremos que salir y habrá bajas, miles de muertos y no quiero estar disgustado contigo cuando eso pase, por eso te pido encarecidamente que hagas caso a lo que dije, por qué la guerra deja cicatrices y heridas, sin embargo no importa si mis heridas aumentan o si mi vida corre peligro, yo daría lo que fuera por su felicidad y si mi vida depende de ello la sacrificaría. —dijo Kankuro de manera firme y mirando detenidamente a Gaara.

Hermano...—fue lo único de Gaara pudo replicar, y luego de dar un respiro profundo pregunto—¿Tan grande es el amor que sientes por ella? ¡Es eso cierto, por eso estás dispuesto a morir si hace falta!

Sí, Gaara sí. Mi amor y gratitud son inmensos por ella, no vacilaria si se tratase de salvarla. Yo sí estoy dispuesto a morir por Sakura. Y si te debo tener de enemigo solo por defender su honor, honor que tú estás manchando, lo haré.
Así que deja en claro ya todo, ve y termina esto de una vez. —dijo Kankuro para después salir cerrando la puerta de un solo golpe.

Vaya, vaya quien lo diría, no hay respeto ante las autoridades ahora...—murmuro Gaara con una sonrisa ladina plasmada en su rostro.

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Esa noche, bajo el manto estrellado del desierto, Sakura se encontraba en el jardín mirando con atención el cielo. Gaara apareció en las sombras, y su mirada se encontró con la de Sakura. Con una voz temblorosa, Sakura preguntó: "Gaara, ¿qué está pasando? Todos parecen saber algo sobre ti que yo desconozco".

Gaara suspiró y finalmente confesó aquello que tanto lo había estado torturando: "Sakura, hay algo que debes saber. Desde hace años, mantengo una relación con Matsuri. No es nada serio. Lo lamento, pero no quería que supieras esto".

El corazón de Sakura se llenó de dolor y confusión. Pero ¿Por qué?, ella no podía reclamar ni enojarse, aquello que tenían no involucraba sentimientos. Ella solo era la prometida de pantalla para fingir que todo estaba bien.

Sakura se encontró paralizada por la revelación de Gaara. Sus ojos verdes miraban fijamente al Kazekage, tratando de procesar la información. El silencio se hizo presente durante un momento eterno antes de que finalmente pudiera articular sus pensamientos.

"Woou Gaara, no puedo creer lo que estoy escuchando", dijo Sakura con voz quebrada. "Esto es... es demasiado para mí. ¿Por qué me ocultaste esto? ¿Por qué no fuiste sincero desde el principio?"

Gaara se acercó a ella, su expresión llena de pesar. "Sakura, te prometo que tenía mis razones. No quería que me vieras diferente, pero es una parte de mi vida que no podía compartir contigo."

El corazón de Sakura latía con fuerza mientras que un remolino de emociones se estancaba en su garganta. "Gaara, esto no es fácil de comprender. ¿Qué voy a ser ahora? ¿Una esposa de vitrina?, nunca hubo un "nuestra relación... nuestro compromiso". ¿Siempre fuimos Tú, yo y ella?

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Holaaa

¿Que tal la mafia?

¿Cómo los trata la vida?

¿Meses de no actualizar?

Jijiji perdón, perdón, pero la U
y mi falta de creatividad
no me deja fluir con
la historia

Cuídense, tomen awita.

Besitos y abrazos :)

Síganme a mí, no a su ex <3