(4)Londres:"Strang's"(4)

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-¡Andando!.

Era una mañana gris y oscura.
Apenas rondaban por las 8:50 am y ya estaba en problemas:

Esa es mi suerte.

-¡Es fácil para ti decirlo -jadeante- Tú entrenas todo el tiempo!.

-Y tú eres un can; Mucho más energético que yo. Vaya que eres rara, Sinclair. -contesta una pelinegra y palida a su acompañante.

¿De que huiamos? Claro estaba. Una vez más, los descerebrados del último grado estaban en nuestra contra.
Les daba tiempo, soy una Addams, como sea los venzo sin embargo...

¿Porqué arruinar mi diversión?.

La menor jala de la mano a la rubia, atrayéndola hacia ella y así,ambas toman refugio en una alcantarilla.
Enid parecía algo agitada por correr por prácticamente toda la escuela. En cuanto ellas cayeron, la mayor pudo escuchar el latir del corazón de su contraria; Sí, ella podía escuchar sus latidos gracias a qué casi por obligación tuvo que recargar una de sus mejillas en el pecho de la contraria para caber mejor.
La rubia ve a la azabache, quién se veía increíblemente intrépida...

-¡Lasciala da sola! -sus ojos brillaron un poco, obligando a todos ellos caer y gritar de dolor; Veían sus peores pesadillas con aquella mirada de muerte de la menor. Su vista tan fría, vacía, sin vida y con terrible sed de venganza era tan notoria.

-¡Addams, Sinclair. Salgan de ahí en este instan--

-!Ancora una parola e li farò galleggiare! -amenazó, haciendo que aquellos directores empezarán a flotar por los aires como si la gravedad no existiera.

-¡Whoah! -todos giraban por el lugar.

-Ya estás segura, Enid.

¿Les confieso algo, queridos pubertos lectores de mi vida privada? Enid es lo único hermoso y radiante que existe en esta putrefacta tierra llamada hogar.

Enid es el verdadero sol en este mundo.
Tenía que decirlo y lo dije.

Enid no decía nada, simplemente estaba boquiabierta al ver logrado observar aquellos hermosos hoyuelos en el rostro de la menor.

-¿Alguno de ellos te hizo más daño? -la menor tomó poco de su brazo, observando algunos rasguños y golpes. Enid quitó su brazo algo apenada.

-N-no. No fueron ellos...

-...

Su madre.

La detestaba sin siquiera concerla.

-Dime quien lo hizo y lo cazaré.

-No fué nadie. Solo...solo caí.

Gritos de desesperación aún se escuchaban.

-Merlina...

-Mande.

-Bájalos. Déjalos en paz. -pidió viéndola a sus ojos mientras se sostenía.

-No. -contesta fría- Ellos son crueles contigo, Enid. No merecen tu misericordia.

-Quizá tengas razón, pero vengarnos de ellos no cambiará nada. Solo...solo seríamos igual de malvados como ellos.

-¿Quien dice que soy la niña más cuerda de la escuela? -sí, eran niñas.
La rubia suspira, colocando su mejilla nuevamente en su pecho, escuchando su corazón.

◁•I𝙿𝚊𝚜𝚝 𝙰𝚗𝚍 𝙵𝚞𝚝𝚞𝚛𝚎|•▷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora