|𝐆𝐑𝐀𝐘 𝐒𝐇𝐀𝐃𝐄𝐒| 𝐨𝐟 | 𝐋𝐈𝐅𝐄 |

11

Desbloquee la cerradura del departamento de Ashley y procedí a entrar , está estaba en una posición algo incómoda donde había mucha comida chatarra y servilletas , ya sabía porque la cara larga, seguro a estado llorando mientras ve sus Doramas, cosa que siempre está haciendo.

— Llegué — avisé y en unos pasos me senté a su lado, bueno no tanto ya que el sofá estaba lleno en cada rincón de envolturas vacías.

— Ujum — no me prestó ni atención cosa que me cabreo , me pide que venga para celebrar y esta ahí con su maratón de series, es decepcionante.

— Enserio... ¿vas a estar ahí toda la noche?

— No molestes, estoy viendo el último capítulo de este dorama.

La observe varios minutos pero esta no hacia contacto visual conmigo, así que sin más me levante y desenchuflé la TV.

— Pero...

— No vine hasta aquí para verte llorar y comer como cerda.

Me ignoró, completamente, ni siquiera saludó, solo paso de mi.

Acaso hoy todos lo hacen.

No podía sacar los recuerdos de mi cabeza y más al verlo aquí, es raro, ¿porque estaría por aquí? , ¿vivirá en el mismo edificio? tal vez se halla mudado.

— Por casualidad...

— ¿Mmm?

— Nada, olvídalo.

Aunque quería sacarme de dudas no creo que mi amiga sepa del todo, si fuera así ya me lo habría dicho.

— Eres tan rara, bueno igual ya que estas aquí puedes ir a por unas cervezas , esto apenas comienza  — me sonrió e ignoró todo lo anterior, hasta que le había desenchufado la TV, increíble el poder de la cerveza.

Sin quejas me dirigí hacia su nevera la cual estaba vacía, no podía creer, nunca deja nada siempre anda comiendo y bebiendo todo.

— Ups, lo siento se me pasó ir de compras antes de llegar a casa, es que podía perderme el dorama.

La observe y simplemente cerré de una la nevera — ok, voy a por unas — mientras daba aplausos como trastornada yo cogía mi bolsa y salía de una vez hacia la tienda más cercana.

Al entrar fui por un café helado y en lo que la máquina hacia su trabajo, tome unas cuantas cervezas las suficientes para no tener que volver por más, las coloque en dos bolsas y pague por estas , escuche el sonar de la campana , avisando la entrada de un cliente, algo que era común y que ignore, tome mi café y mientras lo bebía buscaba entre los estantes algo más que llevar por si se me antojaba , como un gran paquete de Doritos que en estos momentos se había llevado toda mi atención, cuando lo fui a tomar alguien se me adelanto a lo que cogí el que le seguía , me di la vuelta cabreada por la actitud de aquella persona pero la expresión de mi rostro cambio al ver el suyo, me voltee y tome otro paquete y me marche a pagar a la caja. 

Tan difícil era evitarle, porque justo aquí también tenía que encontrarmelo , mientras a el se le hacia tan fácil mirameme e ignorarme, yo aunque me mostrase ante el fuerte, de mi pasada decisión , por dentro todo mi ser era vulnerable , ¿porque de todos los lugares , aquí también ?

— ¿ Naia ? — me llamó el chico de la tienda sacándome de trance.

— A-ah, ésto también por favor — le dí los paquetes y pague por ellos mientras el los colocaba en unas bolsas — gracias , y mandale saludos a su madre de mi parte — le sonreí y tome las bolsas.

Traté de empujar la puerta pero entre tantas bolsas se me hacía difícil, así que en estos momentos tenía una batalla entre esta y yo, pero en un empujón casi salgo volando cuando alguien la abrió y sí una ves más el, su aroma era claro y podía sentirme como en sus sabanas y en su ropa ; me estaba haciéndo quedar en ridículo agarrandome de mi sudadera para no estar besandome con el suelo , rodee mis ojos y sople mi flequillo para tomar equilibrio y así concluir con esta pose tan incómoda , acomode mi ropa y lo mire de mala manera y así seguí pero una ves más agarro mi sudadera haciéndome retroceder , me detuve y sé puso donde mis ojos podían verle pero miro hacia el suelo.

— Eso es tuyo.

— E-eh.

Mire su punto de vista y había uno de los paquetes de Doritos, el cual recogí y cuando recuperé mi posición ya esté se había ido de mi lado , estando unos pasos delante de mí, simplemente continúe mi camino detrás de él y así estuve todo el camino observando su despacio caminar , hasta llegar al vecindario de mi amiga. Una vez que estábamos subiendo las escaleras, ahí donde la luz no daba mucho y el viento se hacía presente, el se detuvo y se volteo para dirigirme la palabra.

— ¿Porqué me sigues?

Me tense con su mirada una vez más solo mirándome a mi, prestando su atención a mi, así como ya lo deseaba.

— ¿Y se supone que te tengo que seguir? , ¿no serás tú el que me sigue? , porque claramente te dije...

— ¿Nena quien es la que está detrás de cada pasó que eh dado hasta aquí?

Mire mi posición justo detrás de sus talones y era obvio que el no me estaría siguiendo cuando claramente me a ignorado por estos meses, más bien ni siquiera me ignoró, simplemente se olvidó de mi existencia, porque claro tiene remplazo en cada esquina , no fui nada para el, ahora si me queda claro.

Tonta.

Y una vez más se volteo dándome la espalda y siguió su camino ,  frustrada por la tontería que le había soltado solo por hacerme la de rogar , seguí hasta el departamento y justo cuando estaba por colocar la clave , ví como entraba con una rubia que al parecer lo esperaba de antes, ellos sonreían.

Ésto por alguna razón me enojaba y mucho.

.

.

.