♤QSMP♤ [Terminada]

Capitulo XXIX

Apartir de aquí los capítulos serán más largos, ya que aún falta mucha trama y no quiero que sean 200 capítulos
:)

-ademas,, lo único que necesito es a ti.-puse mi  dedo indice en su boca.

Narra Maddison

Después de que fui por mi agua no recuerdo absolutamente nada.
Desperté en una silla amarrada y vendada de los ojos escuchaba a dos tipos esperar a su jefe

-Que te pasa como se te ocurre traerla aquí! Sabes que nos va a jódete verdad?.-decía uno de esos.

-es el único lugar donde no levantaría sospechas!

-quédate con el dinero pero arreglaremos como puedas. No quiero morir.

Esa voz se dejó de oír y el otro esperaba al parecer a su jefe, no podía procesar todo ya que aún el cloroformo y algo que me inyectaron es muy fuerte.
Unos minutos más tarde llego alguien más, pero lo regaño por tenerme en este lugar.

-hola pequeña,-hablo un hombre con una voz muy gruesa

-P-porfavor, no me a-agas daño.- me estremecí y hable tartamudrando del miedo

-tranquila pequeña, estoy aquí, conmigo nadie te tratara de hacer daño, nos iremos a casa y serás la mujer más feliz del mundo.-de que mierda esta hablando?

-s-señor, creo que me está confundiendo..-dije también con nerviosismo de como pudiera reaccionar.

-tonterias, si yo soy el más feliz de que ti estés aquí y jamás podría confundirme de ti
Maddison..- ¿como se sabia mi nombre? Esto me tenia mal.

-d-dejeme libre porfavor! Le doy lo que quiera, riqueza, dinero pero déjeme ir! Soy una persona joven y tengo sueños!.-trate de convencerlo pero fue en vano.

-pequeña, dinero es lo que me sobra.-dijo arrogante.

-Tal vez cuando me veas cambies de opinión.- el toco mi frente con sus frías manos mientras que bajaba con cuidado la venda.

Me costaba acostumbrarme a la luz pero pude ver a un hombre de traje y una gorra.

Era alto,mucho más alto y más ancho que yo tenia unos ojos cafés muy lindos y tenia varios lunares que adornaban su cara, es un hombre verdaderamente atractivo, pero pese a eso mi miedo sigue presente.

-¿que pasa linda? Ya te sientes mejor?.-pregunto con una voz seductora.

-disculpe señor pero como cree que me voy a sentir cuando un loco desquiciado me secuestro en una pocilga.

-Mira, como ya te lo había dicho, te tienes que acostumbrar, así que déjame presentarme; soy Quackity De Las Nevadas o simplemente Alex maldonado, soy empresario con el más grande poder; soy dueño de casinos y de empresas de tecnología y innovación, probablemente de todos los dispositivos que has tenido anteriormente vienen de mi.-sonrío arrogante ante su éxito.

-Me importa una mierda tu vida, además que usted no sabe nada de mi, no sabe con quien se está metiendo!
Porque daría todo para salvar
¡¡MI VIDA!!
¡así que le aseguro aseguro si me suelta usted no duraría ni un segundo en mis manos!.-en un ataque de valentía solté eso pero segundos despues sentí un impacto a mi mejilla el cual hizo sangrar mi labio cayendo algunas gotas.

-mirame jovncita, escúchame bien, te guste o no tienes que resignarte a que me perteneces porque no tienes idea de lo que tuve que sacrificar para tenerte.-el apretó mis mejillas haciendo que lo viera a los ojos.'¿¡quedó claro!?.-volvió a pronunciar.

-No podrás determe.-escupi la sangre en su rostro.

-/No hay duda que eso se tendrá que hacer a mi manera jovencita

(...)

Quackity

-¡Marco! ¡Marco! Te ordeno que vengas ya!

-si mi señor digame.

-quiero que le enseñes modales a esta jovencita, solo que rápido, no tengo mucho tiempo y tengo que irme.

-si mi señor pero el efecto solo dura una hora.

-¿¡UNA HORA!? ¡sabes que estoy a horas de mi casa!

-si señor lo lamento pero si se excede de dosis en una aplicación podría matarla.

-bien, prepararme varias dosis para el camino.

Narra Maddison

Quackity salió de la habitación y fue llamando a un tal Marco, escuchaba sus gritos y sabía que se dirigía para acá, todavía moría de miedo.

-hola jovencita, espero y ya estés resignada ¿verdad? Bueno... al parecer
No, pero no te preocupes te vamos a ayudar a que te relajes.

-¿¡de que mierda hablas?.-dije confundida.

-ya lo veras .-dijo y guiño el ojo.