Mi Primer Amor

Capitulo 4-Una bonita tarde de nuevas sensaciones

¿Cual era el problema? ¿A donde me iba a acompañar Jason? Pues habíamos planeado una salida y Ian me había invitado a una cita pero como ya tenía planes le dije que si quería se podía unir al plan y acepto. Pero todo el mundo cancelo y quedábamos solo nosotros. Andaba nerviosa, no estaba lista para verlo.

Pues con las cosas que Jason me llevo, me arregle el pelo para ir a salir con Ian. Los nervios los tengo a flor de piel y todavía no estoy segura que ponerme.

Le había mandado una foto a Stela, mi amiga de la infancia y solo dijo "Eso no, muy corto, yo solo puedo ver ese cuerpo, que ni que Ian ni que fuera Jack Ross"

Hablé con ella era divertido y me entendia cuando leí, así que lo nuestro era una amistad que perduró durante años.

Me decidí por un pantalón de mezclilla pegado al cuerpo, un top  y unas botas. Me hice bucles y un maquillaje ligero.
Estaba lista físicamente, peto no mentalmente, Ian es directo y ya llevamos tiempo hablando por instagram, pero no es lo mismo que verlo en persona.

Así que fui valiente y salí de mi casa lista para el encuentro.

[...]

Lo que pasó después de eso... pues me marco de por vida. Fue el inicio de una relación algo extraña...

[...]

Lo había esperado en un parque cercano a mi casa. Y justo allí apareció, estaba nerviosa, las manos me sudaban y mi corazón iba a mil. No me juzguen estar así con un chico era nuevo para mí.

—Que gusto es verte, Fany, cara a cara eres más bella de lo que imaginé.

Ya nos habíamos visto antes, pero le seguí el juego. Sonreí— El gusto es mío señorito, Ian.

—Que modesta—rio—¿Nos vamos?

Asentí y lo seguí, a medida que avanzabamos más nerviosa me ponía y trate de controlar mi estrés.
Me tomo de la mano y sinceramente me deje llevar.

Íbamos hablando de nosotros, aunque yo andaba particularmente más callada de lo normal.

—¿Segura estás bien, preciosa?—parecía preocupado

—Sí, estoy bien, solo un poco nerviosa—le confesé.

—No te preocupes. Todo está bien.

Seguimos hablando un poco, me olvidé de que era un chico por el que me sentía atraída y que lo tenía justo al lado y me deje llevar como si estuviese con mis amigos.

Llegamos a un puesto de helado y yo pedí uno de chocolate y el uno de fresa. Me sonrió y le devolví la sonrisa, cualquiera que me ve dice que estoy muy enamorada, no he dejado de sonreír desde que lo ví y eso me preocupa.

Él chico a mi lado me guío hacia un asiento en un parque y nos sentamos a comer nuestro helado. Me había preguntado porque me gustaba tanto leer. ¿como le explicó?

Indagar en lo que siento es peligroso, ni yo misma puedo lograrlo, pero desde que llegó a mi vida, busco eso. Quería descubrir que se encontraba detrás de esa máscara que mostraba. Quería encontrar que había en el corazón de esta pequeña lectora.

Me resultaba divertido e interesante. Si quería información mía se la iba a dar, pero no tan fácil, sonreí y saqué de lo más profundo de mi la siguiente respuesta.

—Pues me siento libre, dejo todos mis problemas a un lado y me pierdo me los distintos mundos que existen a través de los libros, son mi lugar seguro, a donde voy cuando no tengo una escapatoria en esta triste y cuadrada realidad...

—Es muy bonito eso que sientes y es bueno que te desahogues así.

Le sonreí entusiasmada por hablar de algo que me gusta de verdad.

—Yo también leo. Algún día hagamos una lectora conjunta o recomiendame algún libro.

[...]

"—A mi no me gusta leer, en absoluto. No me parece llamativo, sin embargo si a ti te gusta siempre estaré dispuesto a escucharte."

Esa es la respuesta que me hubiese gustado escuchar aunque no lo crean, pero sin embargo me mintió para quedar bien conmigo. Ese fue el 1 redflag.

[...]

Un tiempo después, de regreso, nos reíamos y charlamos animadamente. Él chico con que estaba era muy divertido y hacía muchos chistes. Me contó sobre la escuela y todas las bromas que hacía y yo no paraba de reír. Era bonito pasa el tiempo con él.

Se quedó mirandome y sonriendo, no hablo. Su vista se fue guiando hasta mis labios y me volvió a mirar a los ojos.

Poco a poco se fue acercando y mi corazón iba a toda velocidad. Sentía las famosas mariposas en el estómago.

A nos ser que fueran las dos hamburguesas de Burger King que me había comido hace unas horas haciendo digestión.

Mis nervios estaban desbocados y casi estaba temblando. ¿Iba a besarme? Sí, iba a besarme.

¿Estaba lista para esto? obviamente no. Iba a ser mi primer beso y andaba muy nerviosa de lo que pudiese pasar. Creo que voy a vomitar. Necesito matar estás antípodas en mi estómago, están tomando el control de mi mete y no puedo pensar con claridad.

Sentía su respiración en mis labios. Sabía que ni él ni yo íbamos a poder resistir. Y como lo pensé poco a poco fue acortando la poca distancia que quedaba entre nosotros

Sus labios buscaron los míos hasta encontrarlos y fue un montón de sensaciones las que experimente en aquel momento.

Sus labios suaves se movían con experiencia, sin embargo me hubiese gustado decir que los míos reaccionaron a su toque y me deje llevar, pero nos sería cierto.

Me trate de dejar llevar pero era obvio que no iba a poder seguir su ritmo tan deprisa. Era la primera vez que besaba a alguien y mis labios eran torpes, no tenían experiencia.

No es lo mismo leer estas escenas en los libros, que vivirlo. Siempre va a ser diferente y aunque los libros te preparan nunca en el momento vas a saber cómo actuar, solo fluye. Los libros no te dan la experiencia pero te ayudan a saber que lo que sientes es normal y prepárate para lo que viene.

Me había mordido el labio, pero yo no reaccione, mucha emociones me dejaron la cabeza en blanco y me había quedado inmóvil.

—¿Estás bien?

Rápidamente asentí y me olvidé del miedo que sentía en ese momento, olvide de lo que pensaria de mi enexperiencia y me decidí por disfrutar el momento. Volví a acercarme hasta el punto de que no se resistió más y unió nuestras bocas una vez más.

Podría decir que al ser el segundo fue increíble, pero seguía teniendo la inexperiencia que a él le faltaba, aún así me esforcé más y déje los nervios a un lado.

Lo agarre del cabello y sonreí a mitad del beso.

[...]

Ese fue el primer beso de muchos... De los que no me arrepiento. Las sensaciones fueron increíble, me alegro que haya sido mi primera vez en todo. Aunque aveces lo lamente.