Llegué y estaba Dagfinn con los demás
Les vi con 3 de ellos y le cortaron la garganta a uno de ellos
-Esperaremos a Aethelflaed
La monja se fue corriendo
Narra Finan
Uhtred miró
-Es Haesten -respondió- con Eyra
Nos miramos a los ojos y me acerqué cuando la vi
-Habrá venido a vengar a Sigefrid y Erik -respondió Sihtric y me quedo callado mirándola- ¿si no por que estaría aquí?
Suspiro
-¿Quién es Eyra? -preguntó Aethelflaed.
-Por tú bien -volvió a responder Sihtric y se quedó callado- no me atrevería a saberlo
Le miro
Narra Eyra
Salió la monja y le miramos cuando me bajé del caballo
-¿Que es lo que queréis? -preguntó- tenemos alimentos y cerveza, son vuestros -miro a Dagfinn y él me miró cuando le volví a mirar- lo que no tenemos es plata
Si es a nosotras lo que queréis, nuestras vidas os preguntó porque-¡Aethelflaed! -grité- ¡Lo que queremos es a Aethelflaed! -me miraron- ¡Entregarnosla o morireis todos!
-En esta casa no hay nadie llamada Aethelflaed -le miro y le cortaron la garganta a otro.
-¡Negad que está aquí, morirá y os quemaremos el combento con todos dentro! -grité.
-Soltadlo -bajó las escaleras- soltadlo y tomarme a mi en su lugar
¿O es que soy demasiado fuerte para vos? -le cortaron la garganta a el otro- ¿por que os comportais así? ¿Por que asesinais sin motivo?-Dagfinn
-Aethelflaed -respondió Dagfinn.
-¿Por que hay que derramar sangre? -le miro- es de infieles, es impío y vos sois la encarnación del diablo, nada más -cogió un hacha- y lo único que puedo intentar hacer es enviaros con...-cogí la lanza de Dagfinn lanzandosela.
Le di en el abdomen cayéndose a el suelo muerta
Narra Finan
Miramos y se cayó a el suelo cuando Aethelflaed se asustó y nos quedamos callados
-Esto era lo que decía -respondió Sihtric y suspiro.
Narra Eyra
Miramos
-¿No podías haberle quitado el hacha de la mano? -miro a Dagfinn y nos quedamos callados cuando me encogí de hombros.
-¡Aethelflaed! -grité y me acerqué- ¡Ya han muerto bastantes hombres y mujeres para salvaros ese culo escuálido!
¡¿No dio Erik su vida por vos?! ¡¿Cuantos más han de hacer lo mismo?!-En el establo hay muchos caballos -respondió Dagfinn- ¿Por que no han aparecido sus otros hombres?
-Porque como los que acabamos de matar -me miró- están ocupados llenando los calzones
¡Aethelflaed! -grité y nos quedamos callados- esta aquíSaqué mi espada yéndome y me siguieron cuando entramos
-Muro de escudos -susurre.
Lo hicieron y abrí la puerta de una patada cuando lanzaron las lanzas dándole a los escudos
Sonreí y empezamos a pelear
Cogí la daga de uno de ellos muerto y se la lancé a Finan cerca de su cabeza dándole a la columna quedándose quieto cuando nos miramos a los ojos
-No te he dado porque no he querido -me miró- la próxima no fallaré
Nos miramos a los ojos y nos fuimos