FINALIZADO.
Alguna vez has sentido el aroma de un pastel fresco? Con una decoración de fresas frescas, de tres leches y dulce de leche, y cubierto con una crema suave con un leve sabor a vainilla? Pues eso fue lo primero que sintió Spreen al empezar...
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Como antes mencionado, la vida tiene matices, roier se sentía en un círculo cromático pero en vez de tener colores, tenía una escala de grises.
Roier llegó a su casa destrozado, su ropa estaba húmeda, sus ojos ardían como consecuencia el llanto que hace unos minutos había salido.
Pensaba que spreen y él podían ser algo.
Que iluso.
Sabía que la relación de spreen y Juan seguía con la llama encendida, el solo fue a meterse como si el oso le fuera a dar bola.
Simplemente entró a su casa renegado, triste, desilusionado, vio el regalo en la esquina de su cuarto y su corazón dolió mas.
¿Qué iba a hacer con eso?
Se sentía mal amigo, se sentía mal porque se enamoró de spreen sabiendo que su amigo aún sentía cosas por el oso.
Era un mal amigo.
Era el karma.
—Deja de pensar en eso roier, no sea pendejo...— roier se dijo a sí mismo para luego entrar a ducharse no iba a pescar un resfriado por culpa de sus malas decisiones con el amor.
En la ducha pensó en sentarse a llorar en la esquina mientras que se arrepentía de todos sus actos.
Diosito roier no es tu mejor guerrero.
¿Cómo no se iba a enamorar del hibrido? Spreen era atento, buena persona, si tuvieron sus peleas pero ya saben lo que dicen, del odio al amor hay un paso.
Aunque no consideraba que spreen lo viera como algo más que una molestia.
Nuevamente sus ojos se llenaron de lágrimas.
Quería morirse, porque pensaba que le iba a gustar a spreen, era cuestión de comparar sus relaciones.
Juan era un hechicero, de alta sociedad, lindo, tierno, gracioso, con buen estilo de moda.
El bueno el...el era roier, un poco torpe, de risa escandalosa, a veces utilizaba la misma ropa una y otra vez.
Era ruidoso, hiperactivo, coqueto, bromista, exasperante, a veces ni se peinaba de la pura pereza.
Simplemente se ducho rápido, se puso su pijama de spider man y lloro abrazado a su peluche de araña, no quería ni ver Instagram o sus estados, vería a todos disfrutando de la fiesta de spreen mientras que él lloraba.
