Antes
Cassie - 6 años
— Quédate aquí, no salgas.
Mamá me da un beso, me deja sentada en mi cuarto y cierra la puerta saliendo.
Mi papá estaba recién llegando, escuché su auto estacionandose afuera en la calle. Es tarde alrededor de las 8 pm. Mamá estaba conmigo afuera desinflando mi castillo inflable cuando mi papá llegó.
— Hiciste la cena?— escucho como Francisco pregunto a mi mamá.
Es raro llamarlo así. No. Me equivoco. No es raro. Raro era llamarlo papá últimamente.
—Hice pierna de pavo, Cariño.— confirma mama—.Quieres que sirva?
—No mujer, comeré de la olla.— gruño el.
Está borracho. Lo supe por cómo hablo.
Me quedé sentada sin siquiera moverme.
—Cassie!—grito mi nombre.
Aunque una parte de mi se sintió feliz por escuchar que se acordaba de mi, sabía que no terminaria bien. Cómo siempre que llegaba borracho. Mis pasos eran silenciosos y cautelosos cuando iba por el pasillo hacia la cocina. Mi papa estaba comiendo en el mesón de la cocina con los ojos rojos y la mirada en la pierna de pavo mientras se la llevaba a la boca.
—Papa...—mi voz salió en un susurro.
Alzó la mirada. Me sonrió de manera perezosa.
—Mi pequeña Niña, ven aquí.—dejo el muslo de pavo en la olla abriendo los brazos para mí.
Me acerque con una pequeña sonrisa que estaba brotando de mis labios. Lo abrace y me levanto en brazos.
—Quieres un poco de pavo?.—me pregunto.
Su aliento a cerveza y comida me pegó me la cara.
— Solo un mordisco, si— accedi.
me sonrió.
Acerco el muslo de pavo para que pudiera morderlo. La devolvio a la olla y me acerco un vaso de jugo de naranja. Lo agarre con mis manos para beber.
Miro a sus ojos mientras el sigue mordiendo la pierna de pavo. Me preguntó porque tiene sus ojos rojos Siempre.
—Tus ojos están rojos.—le entrego el vaso de jugo.
—Enserio?—me baja de sus brazos.—, que bueno que me dices.
Saca de su bolsillo las gotas que el llama "Colirio". Inclina la cabeza y se pone dos gotas en cada ojo.
—Cassie, sonríe.—mama llega con la cámara y me apunta.
Le desplegó una sonrisa acercándome a ella.
—Mami no me grabes, no me gusta.—digo quejándome.
—Algun día cuando estés grande, verás estos vídeos de ti pequeña.—me sonrió con nostalgia sosteniendo la cámara.—, un besito para la cámara.—me pide.
ESTÁS LEYENDO
El vacio de tus besos En Mis Cicatrices
Teen FictionTodos podemos caer en un punto bajo en algun extremo de nuestra vida, podrían ser muchas fuentes, depresión, Soledad, Furia. Las historias aveces son solo eso, historias, puedes ser reales como también puedes ser sacadas de una mente creativa. Pero...