Blood Moon Rising

11

Jin   

Cuando desperté fue por una sensación de calor detrás de mí y rodeándome. Me incliné hacia atrás y escuché un suave sonido masculino de apreciación.

"¿Estás despierto entonces?" JungKook  me murmuró. Asentí y lo sentí comenzar a pasar sus manos por mi cuerpo. Tal vez debería haberlo apartado, o fingir que no me gustaba lo que estaba haciendo, pero la idea no cruzó por mi mente, a decir verdad. Me había sentido atraído por JungKook  desde la primera vez que lo vi al otro lado de la taberna de Duffy, y todavía lo estaba.

Me giré hacia él y puse mis manos sobre él, tratando de ponerlo encima de mí, y podía sentir los músculos prácticamente en todos los lugares que tocaba. Inclinó la cabeza para tomar mi boca y me abrí a él. Sus besos eran como una droga que deseaba cada vez más, y sus labios eran deliciosos, cálidos y carnosos.

Empezó a apretar su cuerpo contra el mío y me escuché gemir. JungKook  suspiró en mi boca y presionó su lengua contra la mía de nuevo mientras sus grandes manos suavemente, enloquecedoramente, masajeaban las mejillas de mi trasero desnudo. En algún lugar del camino durante la noche, perdí mis pantalones y mi ropa interior y ni siquiera supe cuándo sucedió. Sin embargo, ahora me alegraba. Yo no era realmente un top, sobre todo porque estaba haciendo un buen trabajo, y disfruté la sensación de ser tomado por él. Pero nunca antes había tenido una respuesta tan intensa al ser dominado por alguien. Maniobré mis piernas en el estrecho espacio para envolverlas alrededor de la cintura de JungKook .

“Hazme el amor” dije, empujándome contra él una y otra vez, queriendo sentirlo dentro de mí otra vez. Seguí tratando de alcanzar su pene para poder acariciarlo. “Por favor,” le rogué, sintiéndome desesperado por que se enterrara dentro de mí.

"¿Qué quieres?"

 "Todo. Todo ello." Tomé una respiración profunda y suspiré. "Tu nudo".

“¿Quieres mi nudo, eh? ¿Qué tanto lo quieres?"

Quería que rogara. De acuerdo, se habría necesitado un hombre mucho más fuerte que yo para mirar esos hermosos ojos, sentir la punta de su gran polla contra mi entrada y negarle cualquier cosa.

“Por favor, JungKook . Dámelo”.

“Eso no fue realmente convincente. Esfuérzate un poco más”.

El bastardo quería algo de venganza. Una parte de mí no quería dárselo y una parte de mí anhelaba esa sensación de estar tan increíblemente lleno y pleno. Y el orgasmo que había tenido antes era el mejor que jamás había experimentado. Tal vez un poco de súplica no vendría mal.

“Por favor, JungKook . Por favor. Realmente lo quiero." Puso sus labios contra mi oído.

 “Pero, ¿y si duele? Lo hará."

 “N-No me importa. Por favor, JungKook ... Alfa. Señor."

 Él se rió suavemente.

“No me importa cómo me llames, Jin . Todavía te daré lo que quiero que tengas”.

Le fruncí el ceño y él se rió de nuevo y reclamó mi boca en un beso abrasador. Fue el beso más poderoso entre nosotros hasta ahora, incluso más caliente que el que acabábamos de compartir.

Era necesitado y fuerte, y me besó como si me poseyera, lo cual ya me había dicho una y otra vez que ciertamente lo hacía.

Seguí empujando contra él y él me sonrió y sacudió la cabeza.

 "Déjame cuidar de ti, cariño", dijo. “No hay prisa, y quiero disfrutarte”.

Me besó de nuevo hasta que me quedé sin aliento. Sin embargo, lo escuché y traté de calmarme y dejar que él marcara el ritmo. Dejé de rogar y de luchar para acercarme, cediendo y permitiéndole hacer lo que quisiera conmigo. Su polla ya estaba en mi entrada, pero se agachó y frotó sus dedos allí también, y pude sentir que algo se escapaba de mí. Sin embargo, ya me había enseñado a no avergonzarme cuando hizo un sonido de agradecimiento y separó mis piernas.