ᙏ̤̫͚CAP IIᬊ

113 13 3
                                    


Ya había pasado mucho tiempo desde que aquel heraldo había ordenado la búsqueda de aquella persona la cual a este punto estaba pensando que no existía, 3 meses y nada de información al respecto, esto ya le había hecho desesperar tanta espera ¿era acaso que no existía nadie más que no sea él,tan inteligente como él en toda Teyvat? Enojado y frustrado nuevamente, decidió que tomaría aire, quizás ver lo "podrido"que estaba el mundo le ayudaría calmarse un poco, pero fue justo cuando estaba por salir que uno de sus subordinados lo llamó.

─Señor... Hemos encontrado a alguien que quizás cumpla con sus requisitos. ╶Dijo uno de sus hombres captando inmediatamente la atención del heraldo.

─Asi no se da la información idiota... Pero continua con el informe.╶Dijo el de ojos añiles mientras cruzaba sus brazos.

─Lo siento señor, ya mismo señor. Nuestros hombres lograron encontrar a alguien que quizás cumpla con lo que usted nos pidió, se encuentra en Mondstadt, específicamente en la colina de Dragonspine, es miembro importante del orden de Favonius conoci- ╸Fue interrumpido aquel hombre en su informe a causa de la emoción e impaciencia contraria.

Dime de una vez quien es! ╶Ordeno el de ojos añiles con un tono alzado y mostrando enojo.

Claro señor, lo siento señor, su nombre es Albedo Kreidepinz, también conocido como " El Alquimista Jefe ", creemos que el quizás sea el indicado para su investigación. ╶ Finalizo aquel hombre su informe en cuanto al joven alquimista.

Albedo... ¿Eh?... Bueno esperemos que su título valga la pena, bueno no voy a seguir perdiendo el tiempo luego de que se hizo buscar tanto tiempo, ya mismo iré para Mondstatd. ╶ Dijo seguro el heraldo con un pequeño brillo de fe en sus oscuros ojos.

Preparen mis cosas, lo más esencial... Daré un pequeño paseo por Mondstatd.

─Enseguida señor.

Dijo el súbdito del sexto de los heraldos  mientras el mismo se dirigía  a las afueras de su guarida mientras una pequeña sonrisa entusiasmada se dibujaba en su labios, poco fue el tiempo que perdieron los subordinados de aquel de de ojos añiles en preparar las cosas para este mismo y que este empezará con su viaje a aquella región. Claramente planeaba tratar de estar desapercibido allí, quizás rentando un lugar que pase desapercibido en toda la región. No estaba seguro como lo lograría, quizás estando con el mismo contrario, fue entonces cuando antes de marchar dejó todas esas cosas allí, decidiendo que dejaría todo allí, después de todo no lo necesitaba y sus planos dejarlos donde estaban, pues después de todo no podía arriesgarse a perderlos en el camino o en la misma región, pero también se arriesgaba a que si lo dejaba y alguien aprovechara su ausencia para robar los... Fue entonces que decidido llevarlos con él, y así empezar finalmente su viaje.

Era una mañana agitada, últimamente tuvo demasiado trabajo sin mencionar que últimamente había demasiado con los Hilichurl (no me acuerdo si lo escribí bien, perdón) retrasando su investigación junto a su asistente, simplemente parecía ni avanzar ni retroceder, y últimamente tenía demasiadas quejas por parte de Klee por la poca atención, simplemente parecía que las cosas no mejoraban y que su investigación personal no podría continuarla, claro leyó algún que otro libro sobre el tema por lo cual no estaba completamente perdido en el asunto, quizás sería más fácil con un compañero pero no contaba con uno en este momento y quizás en ningún momento. El rubio ya algo cansado se había sentado en su escritorio recostandose sobre el respaldo de su asiento dejando escapar un leve suspiro.

ೄྀ  𝙋𝙧𝙤𝙮𝙚𝙘𝙩𝙤𝙨 ──┅ 𝑺𝒄𝒂𝒓𝒂𝒃𝒆𝒅𝒐‧₊˚꒷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora