Una Escoba

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RETO

▶ ESCRIBE DESDE LA PERSPECTIVA DE UN OBJETO

Una escoba puede servir para muchas cosas aunque no lo creas como para golpear a alguien que sea un baston para poder tener una bella casita de trapo pero principalmente se usa para barrer superficies y esa es mi nueva tarea.

Recuerdo haber estado feliz en un bosque enorme y verdes, de un momento a otro ya estaba en una especie de fabrica y después estaba en una tienda siendo exhibido. Pasé largos días ahí hasta que una mano suave me sostuvo y miró mi pequeño vestido color azul que llevaba, intercambio unas palabras con el señor y me llevó, fuimos caminando a una especie de tronco gigante que había abierto por la parte de atrás y me había avienta junto a las demás cosas y ella subía al tronco es increíble la fusión que le daba a esa chatarra y comenzamos a andar, tardamos unos escasos minutos para que parara, bajara y comenzará a tomarme de nuevo en sus manos  y dejarme cerca de palos pero con diferentes vestidos, pero ninguno de ellos hablaba, intente muchas ocasiones poder comunicarme con ellos pero nadie me daba una respuesta, así que solo era yo con mi soledad... Bueno ademas 1ue estaba acompañado un suave cantar de avecillas cuando sucedía la dueña comenzaba a danzar muy suave y ella al parecer también se sentía sola porque, siempre me tomaba como compañero de baile y debo decir que era muy mala bailando ya que en la mayoría de las canciones hacía 1ue mi vestido se arrastrara por el suelo y se llenará de polvo o tierra e inclusive de uno que otro cabello pero eso me importaba poco, el poder bailar con ella era exquisito y fue así durante días, semanas, meses e incluso años ambos fuimos compañero del otro sin dudar, en muchas ocasiones la vi llorar, ella me vio caerme y levantarme dándome una pequeña sonrisa de consolacion la adoraba.

Un día ella me volvió a tomar en sus manos pero me dirigía una mirada fría y sin emociones ¿que estaba pasando? Me pregunté a mi mismo, y lo que pasó después me dejó en shock, me había partidor en dos con la fuerza de sus manos y su rodilla para arrojarme al lado de una bolsa de basura, entristeció y fue cuando pude ver mi vestido todo desgastado, sucio e incluso en algunas partes me hacía falta vestido. Entendí porque me había botado, ya no era bonito como el día en que llegué a su casa, como podría presumir e con las demás escobas luciendo de este modo, lo último que hice fue mirar al cielo y agradecer la gran vida que había vivido y finalmente cerré mis ojos

30 DÍAS PARA ESCRIBIRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora