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AU. . .

A Xiao le asustan los truenos, y Venti es un cabrón que se aprovecha de ese miedo.

Las noches de tormenta eran un dolor de cabeza para Zhongli, con el llanto insoportable de su pequeño niño y las molestas bromas de su esposo.

—Xiao, los rayos, son los sonidos de las naves espaciales. Los aliens están en camino, ¡vienen a conquistar el mundo!— Venti dijo de forma segura, asustando a su hijo (más de lo que ya estaba, probablemente), el cual sólo comenzó a llorar alegando que no quería que los aliens se lo llevarán.

—Cielo, los alienígenas ni siquiera son reales.— Zhongli trato de calmar al menor con su tono de padre responsable, pero el pequeño niño solo lloraba sin control.

Zhongli le dedico una mirada de muerte a su marido. Esa noche dormiría en el sofá, Venti suspiró de forma nerviosa, quizá si se había pasado, aunque, vamos era solo una broma inofensiva.

—Mi niño...— Venti trato de llamar la atención del menor, Xiao se froto sus ojitos mientras lágrimas caían sin control. —Era una broma, los aliens no son reales, ¿está bien?

El niño soltaba hipidos, estaba molesto y asustado.

Zhongli volvió a mirar a Venti con una mirada acusadora, el más alto se acercó  al pequeño y lo levantó en brazos, arrullandolo para calmarlo.

—No quiero que los aliens me lleven.— Dijo Xiao, estaba inquieto.

—Y no te van a llevar. Yo te voy a cuidar, ¿de acuerdo?

El niño asintió, mientras cerraba sus ojitos, su padre siempre le daba mucha calma, incluso había olvidado por completo los truenos de hace rato, y se durmió.

—Bueno...— Venti habló y Zhongli lo interrumpió.

—No digas nada, hoy duermes en el sofá.— El mayor se fue con su niño en brazos dejando a Venti derrotado.

—Sólo era una bromita...


beloved child ; zhongvenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora