- tienes pestañas muy largas - habló una peli azul
- y ojos muy lindos - le siguió una castaña.
- ¡Mira su piel! Es tan suave... - continuó una chica de vestido rojo con puntos blancos.
Ciertamente ellas estaban asombradas, les parecía muy linda la chica extraña que acababa de llegar al palacio, y más extraño era que le proporcionaran tantas comodidades.
- hueles tan bien... - exclamó la primera chica con cara de alegría mientras le olfateaba y la castaña la reprendió.
- estás cruzando la línea, Nejire.
- lo siento, Itsuka. ¡Es que ella es tan linda! ¿De dónde habrá llegado?
Tamaki les había encargado a las mejores chicas del palacio proporcionarte ciertos cuidados, ofrecerte mejor ropa, y claro, prepararte para una cena que el mismísimo príncipe Eijiro había organizado.
- ¿Es verdad que no puedes hablar? - cuestionó Kinoko con inocente curiosidad.
Asentiste cómo respuesta, sino ¿Qué otra forma de comunicarte habría?
Tallaron tus manos con suavidad y vertieron más agua sobre tu cabello, masajeando con suavidad tu cuero cabelludo y sacando el shampoo que recién habían colocado.
Habían burbujas por todas partes y el calmante olor de unas velas aromatizantes inundó tus fosas nasales llenandote de paz, nunca habías recibido este tipo de atenciones, debajo del mar no era necesario tomar un baño, o lavarse el cabello.
Todo era tan nuevo ¡Tan diferente! Antes habías estado abrumada, pero el suave contacto de las chicas a tu lado se llevó toda ansiedad dejando tan solo una muy tranquila tarde.
- ¿De dónde vienes es muy bonito? - preguntó Nejire con una pequeña sonrisa y te hizo recordar.
Las hermosas luces marinas y cada bello y colorido coral. Lo lindo que era ver un banco de peces ir de un lado a otro y lo musical del lugar.
Antes no habías notado cuan hermoso era, cuan distinto y fascinante era el fondo del mar, y te entristeció un poco darte cuenta de ello en tu situación actual.
Asentiste con una triste sonrisa y las chicas notaron el repentino cambio de humor.
- lamento si pregunté algo inadecuado...
Negaste frenéticamente con la cabeza mientras intentaste detener sus disculpas, en realidad no había hecho nada malo.
- ¿entonces no te molesta?
Negaste una vez más.
- ¡Genial! - exclamó de nuevo sonriente - ¿Podemos ser amigas?
Tus ojos brillaron mostrando la belleza de tus facciones, Nejire casi pudo ver al reluciente mar en lo azul de tu mirada y la calma que transmitias la arrulló. ~ ¡Sí!~ pensaste antes de asentir con alegría.
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La Sirenita •Eijiro Kirishima•
FanfictionUn mundo nuevo por descubrir. Lamento decirles que no haré tal cual el cuento porque algunos detalles de el mismo me causan conflictos internos. será la misma historia, pero adaptada a mis gustos y quien sabe, tal vez son los tuyos ;) Mwah💋 Beso s...