Dos: Yuli B.

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-Un gusto en conocerte Lizy-con una sonrisa afable la mayor quedaba encantada por la castaña que estaba al lado de su hija en la entrada de su casa

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-Un gusto en conocerte Lizy-con una sonrisa afable la mayor quedaba encantada por la castaña que estaba al lado de su hija en la entrada de su casa

-El gusto es todo mio señora-

-Por favor llámame Luan-

-Por mi no hay problema, se ve muy joven- adulo Lizy con su sonrisa blanquecina y sobretodo pulcra

Rose estaba entre las dos con su típica mirada neutral y llegando al aburrimiento

-Te pido por favor que tengas paciencia con mi hija gruñona- da un vistazo a la mencionada- no era así antes...-

-¿Antes...?- repite Lizy en trance, como si su sexto sentido de la curiosidad se hubiera activado

-Bien, esta hija gruñona ya quiere tomar un baño. Nos vemos-interrumpe Rose.

Ella entra a su casa sin importarle en dejar a las dos féminas pero antes de subir las escaleras escucha la puerta cerrase.

-Rose-

La llamada de la mayor hace que la peli blanca se detenga en las escaleras

-Tu padre y yo iremos a la cena de su colega del trabajo, así que no podremos cenar juntos esta noche-

-Esta bien-

Su voz confirmaba que no había ningún problema además que siempre cenaba con sus padres no le molestaba que salieran ellos dos de vez en cuando.

Sin embargo, su madre se veía ansiosa aún al lado de las escaleras

-Estaba pensando si quisieras ir..-

-Tengo deberes mamá- espeta

-Entiendo...Entonces no te retengo más, ire a alistarme-

Al terminar su charla Rose sube las escaleras y se encierra en su habitación dejando su maleta caer a su escritorio.

Quitándose su uniforme para darse un baño, su teléfono vibra anunciando nuevos mensajes, al revisarlo no era nadie más que Lizy.

"Mañana llevare galletas horneadas por tu servidora así que guarda espacio en tu estomago"

-Cierto que le di mi contacto-murmura

Esa mujer no paraba de hacer chistes malos hasta que le diera mi número

Enserio me preocupa que en el futuro no se dedique a la comedia. Se moriría de hambre.

Espera.

¿Por que debería preocuparme?

A penas y la conozco

Apagando su teléfono lo lanza sobre su cama para tomar su tan esperado al baño

Girando el grifo para que el agua llene la bañera, Rose prende su estéreo, la melodia clásica resona en sus oídos creando un ambiente afable.

Pero sobretodo el ambiente que tanto deseaba después de su día recapitulando que ahora tiene a una princesa pegada a su lado como goma de mascar excluyendo el hecho de él encuentro con esos hermanos que lo único que no toleraba es que el cabello de ambos era para envidiar.

Careless-Rindou HaitaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora