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Cuando Felix regresó a la sala de estar, los demás les dijeron que Hyunjin ya se había ido diciendo que tenía algo más que hacer

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Cuando Felix regresó a la sala de estar, los demás les dijeron que Hyunjin ya se había ido diciendo que tenía algo más que hacer.

Es por eso que Felix se dirigía al dormitorio ahora.... No había terminado de hablar con ese psicópata todavía y el hecho de que estuvieran solos en su dormitorio no cambiaba nada.

Los demás no querían que Felix se fuera porque acababa de llegar después de 6 días pero ahora mismo tenía otras prioridades.

Rápidamente el rubio sacó su llave y abrío la pesada puerta de madera de su dormitorio. Ya estaba oscureciendo afuera y se preguntó si Hyunjin estaría allí.

Pero cuando entro y encontró al chico sentado en el sofá mirándolo directamente a los ojos tan pronto como entró el menor, supo que sus dudas eran en vano.

Silencio.

Felix lo miró y  Hyunjin lo miró y nadie se movió.

"Sabía que me seguirías hasta aquí." Hyunjin luego rompió el silencio y se levantó lentamente, pero no sin romper el contacto visual. Su expresión era fría y amenazante.

"¿Sorprendido de saber que era yo desde el principio?". Felix preguntó sarcásticamente y también dio un paso más cerca.

"No, en realidad no. Tenía mis pensamientos sobre ti, pero los dejé pasar demasiado pronto.", Hyunjin dijo.

"¿Así que realmente te enamoraste de esa mierda de 'Me gustas'?", el pecoso se rió de él y era obvio que el pelirojo tenía que controlar su ira. Apretó los puños por un segundo y entrecerró los ojos. Felix lo tiene justo donde quería. Ahora ya no era él quien tenía el control.

Pero Hyunjin no se dejó provocar y cambió de tema.

"Dime Felix, ¿cómo sobreviviste a eso?" susurró, ahora totalmente tranquilo de nuevo y dio otro paso. Estaban a solo 1 m de distancia el uno del otro ahora, pero de nuevo Felix no rompió el contacto visual.

"No lo sé. Tal vez Dios simplemente no quería que muriera a manos de un asqueroso asesino en serie". El rubio sonrió felizmente al notar que hizo hervir la sangre de Hyunjin.

Felix recordó lo que dijo Minho... deberíamos ayudarlo y no empeorarlo. Pero no, primero se vengaría.

"Dios no existe en mi mundo y no podrá salvarte una segunda vez", murmuró el mayor.

"¿Qué es eso? ¿Quieres intentar matarme una segunda v-"

En menos de un segundo, Hyunjin agarró el cuchillo de cocina del mostrador y saltó hacia el menor para hundirlo profundamente en su pecho.

Mierda.

Felix tropezó hacia atrás y cayó de rodillas mientras siseaba de dolor. Un chorro de sangre caliente volvió a teñir de rojo el suelo.

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