Capítulo 18: Revelación

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Bill: ¿Es este mi final? Como he podido ser tan descuidado y adentrarme en un terreno tan peligroso sin haberlo estudiado de antemano... hah, que estoy diciendo... nada de esto tiene sentido... un mundo prehistórico conectado al nuestro... un mundo lleno de magia bajo nuestros pies... estas cosas superan toda la lógica y el entendimiento humano. Tan solo... me hubiera gustado estudiar estos mundos un poco más y descubrir la verdad.

Esos patrones de colores... nublaron mi visión y caí al agua. Pero es extraño... no estoy mojado, no siento frío, ni calor, simplemente veo como me voy hundiendo más y más hacía las profundidades y el agua que se veía cristalina de la superficie se está convirtiendo en un mar de oscuridad. Los colores se siguen destelleando sucesivamente... pero al final solo queda oscuridad.

¿Y esa voz en mi cabeza? Parece la misma que me susurró al oído mientras miraba el agua del lago. Pero esta vez es nítida y cálida, casi parece como si fuera un ángel que me estuviera hablando con su voz celestial. Las ondulaciones del agua acompañan el sonido y lo hacen resonar por todo el lago... "¿Podéis sentir el origen de la corrupción?"

Me resulta gracioso que utilice el plural, seguro que muchos aventureros incautos han sufrido el mismo destino que el mío. ¿Aventureros? ¿Pero que estoy diciendo? Estamos en un mundo del que ni siquiera sabía su existencia, ¿qué clase de humano normal va a aventurarse aquí? Está claro que la presión del agua está afectando a mi capacidad neurológica...

Un momento... un humano normal no puede acceder a Magmoria... ¿pero qué pasa si es un mago? Sí... mi hipótesis podría ser correcta. Las palabras de Erk'zar lo confirman: "Hacía milenios que no recibíamos la visita de seres humanos" Eso quiere decir que en algún momento algún ser humano ha pisado este planeta, y si mi suposición es correcta ese mago es-

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Una luz misteriosa iluminó las profundidades del lago y el agua se evaporó ante los ojos de Bill, abriendo paso a una sala envuelta en un blanco tan puro como la misma luz del día. Bill siguió descendiendo por aquel plano en blanco hasta aterrizar suavemente en un lecho de flores rojas como el carmín, cuyo color contrastaba con el blanco de toda la sala.

Bill no sabía si se encontraba en otro mundo, en otra dimensión, o si simplemente había muerto ahogado, pero fuera como fuere, ahora podía volver a mover los músculos y respirar con normalidad, tras unos largos minutos que más que una asfixia le parecieron un letargo profundo del que solo la muerte lo liberaría.

Levantó la cabeza y miró a su alrededor, no había absolutamente nada. Era como estar en un cuadro abstracto carente de significado, un simple lienzo en blanco decorado con un lecho de flores en su base.

Decidió gritar para ver si alguna voz le contestaba pero solo obtuvo respuesta del eco. Ya había dejado de escuchar la voz en su cabeza que le hacía la misma pregunta una y otra vez, ahora estaba completamente solo.

Pensó en la pregunta una y otra vez, intentando buscar un significado a la misma. Pero no entendía a qué se refería con el origen de la corrupción, ¿tal vez a las acciones negligentes de los magos cuando invocaron el meteorito? De cualquier forma sentado en el lecho de flores no iba a solucionar nada, aunque debía reconocer que se estaba bastante cómodo.

Caminar sin rumbo tampoco era una opción factible, quién sabe dónde acabaría... ¿pero entonces que podía hacer? Gritar tampoco daba ninguna respuesta más que la del propio eco, aunque tal vez si lo seguía intentando...

Bill: ¡¿Hola?! ¡¿Hay alguien?!

Nada. Esta vez tampoco hubo suerte, tal vez lo que hacía falta era esperar. Se quedó sentado en el lecho de flores meditando durante horas sobre sus opciones, pero ninguna acababa de convencerle. Fue entonces cuando decidió probar una nueva idea, tal vez la respuesta a la pregunta se encontraba precisamente en la misma pregunta...

Dan'thil: El último linaje de magosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora