Oscar y Jefferson, amigos desde la infancia, compartían muchas risas, aventuras y secretos, eran mejores amigos, inseparables
Desde niños eran el alma de un pequeño pueblo llamado Villapene, eran los únicos niños en el pueblo, siempre alegraban a los Villapenianos con sus travesuras
Al crecer cada uno formó su carácter:
Oscar, era un chico tímido, le apasiona la música y le encantaba la guitarra, desde pequeño siempre estaba perdido en sus pensamientos
Jefferson, por el contrario, era un chico extrovertido, ruidoso, le encantaba el deporte, en especial el futbol y siempre estaba dispuesto a animar a su amigo
A pesar de ser muy diferentes, ellos nunca se separaron, crecieron juntos y siempre estuvieron para ayudarse cuando lo necesitaban