Hay algo que debo decirte...

Capítulo 5: "En la comunicación hay que saber escuchar"

Edgar: ... ¿Por qué accedí?... ¿Qué ganaré?... Y si usa todo en mi contra... y si él... ¿en realidad está fingiendo?...

De una euforia inexplicable pasó a estar en un estado paranoico. Parecía que había olvidado el último comentario del "prisionero", pero luego llegó a la conclusión de que había metido la pata en terminar en un asunto más personal con aquella persona.

Edgar: (Murmurando) Él puede estar fingiendo... él puede estar fingiendo... él puede estar fingiendo...

Se decía a sí mismo mientras se mordía un poco las uñas.

'Oh... realmente eres un hombre'

Dejó de morderse las uñas al recordar esas tenebrosas palabras.

Hace 11 años tuvo el primer contacto desagradable por su antiguo tutor, el cual una noche tras estar borracho fue a aclarar sus dudas sobre el género de su alumno puesto que le parecía raro que un hombre tuviera rasgos demasiado finos.

"Que asco... siento a veces que está mirándome... y eso que lo maté con mis propias manos... ¿será su fantasma?"

Pensaba para luego taparse más temblorosamente.

"No... no puede ser un fantasma... es un demonio."

Cerró los ojos para luego esforzarse en relajar sus pensamientos para así dormir. Tardó alrededor de 1 hora o 90 minutos.

- DIA SIGUIENTE-

Eran las 7 de la mañana y ya la sirena de la mansión estaba levantando a sus "huéspedes". Todos salían de sus cuartos adormilados pero ya arreglados, bueno, había excepciones.

Norton: Hombre... en estos momentos de envidio. (Con ojeras)

Kurt: Ehm Ellis, tu pijama es colorida.

Mike: Pft- JAJAJAJAJAJA ¡HASTA LLEVA ZANAHORIA!

Norton: (Coscorrón) Eres muy ruidoso.

Mike: ¡AUCHIIII! (Sobándose)

William: (Orgulloso) No me siento para nada avergonzado de traer mi pijama, al contrario, me siento poderoso. (Posando)

Norton: Algo me dice que sigue dormido. (Monótono)