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La alarma de mi celular empezó a sonar, por alguna razón sentía que era más ruidosa de lo normal.
Mi cabeza me daba vueltas, me costaba abrir mis ojos. Con mi mano traté de buscar mí celular para apagar la molesta alarma pero, de la nada se apaga, como si alguien la hubiera apagado. Rápidamente me levanté, miré a mi lado. Estaba en un habitación desconocida.
Empecé a asustarme. Sentí como la cama se movía, volteé lentamente, era Do Hyun. Me alejé de él, estábamos muy cerca. ¿Qué pasó anoche?.
"Tranquila..." dijo con una voz dormida y muy ronca "Quisiste quedarte hoy en mi casa, porque no querías ir a la tuya..." sentí un leve ardor en mis mejillas. Do Hyun se sienta en la cama "Estabas muy borracha anoche..." sonrió.
Do Hyun estaba despeinado, sus lindos ojos entrecerrados, su voz estaba muy ronca, se veía muy sexy. Empecé a sentir calo en todo mi ser, una palpitación extraña, rápidamente desvíe mi vista de él.
'Que vergüenza, que vergüenza' me dije a mi misma, muy sonrojada.
"Ya es tarde, ¿Siempre te levantas a esta hora?" pregunta burlón.
"Si no pongo alarma me despertaría a las 2 de la tarde" dije dándole la espalda, aún sentía vergüenza.
"No me des la espalda, es de mala educación" creo que se recostó en la cama, ya que esta se había movido. Sentí como acariciaba delicadamente mi espalda.
"Lo siento es que..." me di la vuelta, para verlo. Dios que hombre tan sexy, era el único hombre que se veía tierno pero sexy a la vez "Me da un poco de vergüenza que me hayas visto borracha" él se soltó a reír.
"Es lo de menos preciosa" dejó de reír para verme a los ojos, hubo un silencio entre ambos, nada incomodo, pero si me ponía nerviosa, el como me miraba "Te ves muy hermosa recién levantada" se paró y se acercó a mí, acarició mi mejilla derecha con su mano, de una manera tan delicada, creí que me iba a besar, pero se separó "¿Quieres comer algo?" quedé callada unos minutos, procesando lo que estaba pasando.
"Ehmm, sí... Sí quiero comer" me levanté rápidamente de la cama, aún estaba un poco mareada, y el levantarme así me hizo perder el equilibrio y casi me caigo.
"Ten cuidado, no quiero que te me lastimes" reímos un rato.
[...]
El desayuno de ambos fue rápido, _____ no comió mucho porque su estomago se lo estaba prohibiendo. Tanto vino anoche la hizo sentir mal.
"¿No quieres tomarte algo para que se te pase?" la chica negó.
"No, se me pasará, no te preocupes, gracias" le sonrío "Por cierto... Tu casa es muy linda, me gusta mucho como la tienes decorada" el castaño le agradeció.
