Bromas • Zhongven

• Perteneces conmigo •

     Venti estaba realmente harto de ver a Zhongli con su novio. Le tenía demasiados celos a el, era un deportista, era guapo y carismático. Cosas que Venti no era, el era feo (realmente no) poeta y un vago en pocas palabras. Realmente quería que Zhongli dejara a su novio para estar con el.

     Era lo mejor del mundo, ¿Cómo Zhongli podía resistirse a sus encantos? Aunque no quisiera admitirlo sabía muy bien la respuesta, solo lo veía cómo un amigo. Y eso lo mataba lentamente, el le daba todo lo que su novio no le daba. ¿Por qué tenía que ser tan estúpido para no darse cuenta? ¿Por qué tenía que estar enamorado de un chico muy estúpido?

     Se preguntaba a si mismo en qué tenía que mejorar para estar a la altura de Childe, no es que lo odiara. Pero, sería mejor si no estuviera. Venti solía escribirle cartas a Zhongli contándole todo lo que el no captaba, obviamente, no se las daba porque le daba mucha pena. En un intento desesperado por hacerle saber esto a Zhongli le llevo un montón de cartas que tenía y las dejo en su casillero con la esperanza de que las leyera todas.

     Al acabar las clases, Zhongli se acercó a su casillero sin esperar todo lo que le esperaba. Al abrirlo un montón de cartas cayeron de su casillero, el pelicafe no podía creerlo. ¿Acaso... Tenía un admirador...? Era lo más probable, pero tendría que leer cada una de las cartas para confirmarlo. Podría decirse que Venti había cumplido su objetivo.