"El Asesino de Bata Blanca"

"El Juramento Oscuro"

En la tranquila aldea del siglo XVIII, envuelta en sombras y secretos, nació el pequeño Jonathan Blackwood. Sin embargo, su infancia no estuvo marcada por la dulzura de la inocencia, sino por la crueldad oculta detrás de las puertas de su hogar.

Blackwood provenía de una familia de renombre y respetabilidad en la sociedad. Su padre, el distinguido Doctor Samuel Blackwood, gozaba de una reputación envidiable, mientras que su madre, Lady Evelyn, era conocida por su belleza y elegancia. Pero detrás de la fachada de la aristocracia, se ocultaban verdades aterradoras.

Desde temprana edad, Edward fue víctima de un trato cruel por parte de sus padres. Los insultos y la humillación eran su pan de cada día. Los gritos y los golpes se convirtieron en la banda sonora de su infancia, y las cicatrices en su cuerpo y alma eran testigos mudos de su sufrimiento.

Los momentos más oscuros ocurrían en las frías noches, cuando su padre, un hombre impasible y despiadado, le sometía a sesiones de tortura psicológica. Le decía que nunca sería lo suficientemente bueno, que estaba destinado al fracaso y que su existencia era una carga para la familia. Las palabras venenosas penetraron en el corazón de Blackwood, sembrando la semilla de la ira y la venganza en su interior.

A pesar de la tristeza y el dolor, Blackwood encontró refugio en los libros y en el silencio de su habitación. La medicina se convirtió en su salvación, en su forma de escapar de la realidad y de encontrar un propósito en medio del caos. A medida que se sumergía en los tratados médicos y las teorías científicas, se daba cuenta de que el conocimiento podía convertirse en un arma poderosa.

El pequeño Edward soñaba con el día en que podría liberarse de las cadenas de la opresión y vengarse de aquellos que le habían causado tanto sufrimiento. Sus experiencias traumáticas moldearon su visión retorcida del mundo y alimentaron una sed de poder y control.

En la oscuridad de su habitación, mientras sus padres dormían, Edward trazaba los primeros esbozos de su destino. Prometió convertirse en un médico formidable, pero su propósito iba más allá de salvar vidas. La semilla de la maldad se había plantado en su corazón, y en lo más profundo de su ser, nacía el nacimiento del Dr. Jonathan Blackwood, el médico asesino.

Y así, con la noche como cómplice y la venganza como su motor, Edward emprendió un camino retorcido que desafiaría los límites de la moralidad y sumergiría al mundo en un abismo de terror y sangre.