Capítulo 2

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-Estoy bien... -murmuro el pobre chico agarrando la mano ajena para levantarse del suelo, una vez de pie acomodo sus lentes y suspiro pesadamente para bajar la cabeza avergonzado.

Un silencio incómodo se formó en el lugar. El cenizo no sabía que decirle y tampoco pensaba irse así como así y dejarlo ahí, este dio un suspiro pesado y luego de pensar un poco finalmente hablo.

-¿Cómo te llamas mocoso? -Pregunto sin apartar la mirada de él, fijándose como este acomodaba torpemente sus lentes y como evitaba mirarlo cosa que odiaba a decir verdad, pero tampoco pensaba obligarlo ya que aún podía seguir algo alterado por lo sucedido recientemente.

-Izuku...Izuku Midoriya tu eres bakugou...¿No?...- Hablo con cierta timidez. Aún no podía creer que este lo había salvado, pero gracias a eso al menos tendría un rato de paz.

-Asi es...veo que me conoces...como sea, hay que ir a clase. ¿A qué salón te diriges?. -En lo que hablaba metía sus manos en los bolsillos sin apartar su rojiza mirada de él. Izuku era un poco más bajito que el, cabello verde, un par de lentes y ropa que solo un "nerd" usaría según el; Suéter, pantalones de mezclilla y unas botas rojas. Sin embargo no podía ver bien su rostro debido a que este se mantenía cabizbajo.

- 2A tengo clase de matemáti...- No pudo ni terminar la frase pues el cenizo lo agarró del brazo y lo saco a rastras de los baños. Izuku chillo porque se espanto ante la acción de este creyendo por un momento que iba a golpearlo, mientras katsuki pensaba que si se quedaban más tiempo allí llegarían tarde a clases.

-¿Q-que haces?...-Pregunto el menor algo temeroso al ser arrastrado por el cenizo. Este simplemente se detuvo un momento y lo soltó para que ahora el caminará por su propia cuenta.

-¿Qué no ves? Té acompaño a tu clase, que suerte tienes nerd porque justamente yo también me dirijo hacia allá. Eso sí, no te acostumbres a mi compañía. -Izuku solo asintió como respuesta y retomaron el camino en completo silencio, un silencio ciertamente incómodo pero ¿Qué podían decir?...no eran amigos y tampoco se tenían confianza como para mantener algún tipo de conversación.

Finalmente luego de un par de minutos caminando ambos llegaron al salón, para su buena suerte el maestro aún no había llegado por lo que estaban justo a tiempo. Antes de ingresar el pecoso se detuvo a lo que katsuki hizo lo mismo viendo al más bajito con cierta confusión, este levantó su rostro y le dedico su más dulce y sincera sonrisa.

-Muchas gracias por salvarme bakugou, créame, estoy muy agradecido...espero poder pagárselo algún día. -Finalmente el cenizo puso divisar aquel rostro del peliverde.

Mierda...se veía jodidamente bonito...¡Un momento!...nonono, estaba generándose ideas erróneas en la cabeza, casi que al instante desvió la mirada del pecoso y se cruzó de brazos.

-Como sea...solo intenta no meterte en problemas pequeño idiota. -Katsuki no espero respuesta y rápidamente ingreso al aula. En camino a su asiento pudo sentir como su corazón extrañamente latía más rápido a lo habitual y a la vez sus manos sudaban de forma ligera.








¿Qué mierda le pasaba?








Las clases transcurrieron con normalidad hasta que llegó la hora del receso, aquel pequeño pecoso agarro sus cosas y salió del aula para ir en busca de su mejor amiga. Toda la clase la paso algo pensativo frente a lo sucedido en los baños y frente a su salvador, pero no entendía realmente ¿Por qué le daba tanta importancia? simplemente fue amable con el, aunque eso era algo raro en Bakugou.

Dejo sus cosas en el casillero e iría directamente a la cafetería ya que allí solía encontrarse con sus amigos porque para su mala suerte eran muy pocas las clases que tenían juntos. Nada mas entrar al lugar no tardo en recibir comentarios ofensivos de las personas que pasaban cerca de el aunque la mayoría de esas ofensivas palabras eran de los integrantes del equipo de futbol, el estaba tan acostumbrado que ya solo los ignoraba.

-¡oye marica! ¿no sabes que es de mala educación el ignorarnos?- Hablo Harry, uno de los chicos que lo molesto hace horas atrás en los baños, más específicamente el que lo golpeo.

Desde hace ya un par de años que el pobre chico de pecas no tendría la mejor reputación del mundo y todo gracias a ese par de chicos los cuales esparcieron el rumor de haberlo visto besarse con otro chico en los baños de la escuela, eso le causó muchos problemas al pecoso, más que para ese momento tuvo su primera pareja el cual termino cambiándose de escuela y cortando con el por culpa de los comentarios ajenos, no solo eso, en ese punto de su vida aun no había salido del closet con nadie pero gracias a eso todo el mundo se entero incluso su madre.

La homosexualidad en esa actualidad aun no era algo bien visto en la sociedad por lo que eso le afecto mucho a izuku en un principio le costo mucho el aceptarse a si mismo por creer que no seria "bien visto" y que todo el mundo lo vería como un bicho raro. Actualmente no le importaba y era abiertamente gay, incluso su madre lo apoyaba.

Trato de hacer como que no escucho los comentarios del muchacho y agarró una bandeja para pedir su comida; algo simple. Pasta con albóndigas, fruta y algo de beber. Ya después de dirigió directamente a los lugares del fondo donde se sentaba con uraraka e Iida sus dos mejores amigos.

—¡Izuku!...- saludo de forma animada aquella castaña mientras miraba a su amigo.

—Buenos días midoriya - hablo seguidamente el azabache a la par que dejaba su libro de lado y acomodaba sus lentes.

—Buenos días chicos ¿Qué tal las clases?- pregunto con una pequeña sonrisa mientras se acomodaba para empezar a comer. Ellos eran los únicos que no se alejaron de él a pesar de los chismes y comentarios de los demás, realmente les tenía mucho cariño ya que siempre estuvieron para el.

Por otro lado el cenizo se encontraba sentado junto con su grupo, el comía en silencio mientras que estos hablaban sin parar, en eso kaminari suelta un comentario en el cual todos voltearon a ver al cenizo sorprendidos.

—Escuche que en la mañana salvaste a un chico de ser atacado por unos bravucones ¿Eso es cierto bakugou?- El cenizo nada más levantar la mirada noto como esos idiotas se le quedaban mirando con notoria sorpresa ante lo que dijo el otro, este solo rodo los ojos como queriendo darle la menor importancia posible.

—si ¿Y que?...- diría en un tono molesto mientras volvía su atención a su comida.

—Hermano...¿Te encuentras bien?... Tu no sueles hacer esas cosas -Se notó preocupación en el rostro pelirojo ya que conocía muy bien al cenizo y el no era de hacer eso. Aunque, cualquiera diría que estaba exagerando pero ¡Estamos hablando de bakugou!.. el no ayuda a las personas ni siquiera a sus amigos.

—¿De que mierda hablas?...no exageres imbécil. -Gruño molesto dejando su plato a un lado, definitivamente se le habría quitado el apetito por culpa de las estupideces de estos.

















—Bakugou...¿Acaso te gusta ese chico?...

Mi nerd-KatsudekuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora