La mañana había llegado y consigo el sol, este entraba por el gran ventanal de la habitación del rubio, este se estiró y se levantó de su cama para ir a bañarse
Terminó de bañarse, cambiarse y bajó a desayunar encontrándose con su adorada compañera de casa
— Yuuna! — Dijo el rubio al ver aquella mujer de unos 50 años aproximadamente
— Hola Deidara — Dijo la mujer con su brillante sonrisa
Ambos se abrazaron y después se sentaron a desayunar juntos mientras charlaban de las calificaciones del rubio
— Yo me esfuerzo señora Yuuna, pero algunas cosas no las entiendo —
— Tranquilo Deidara, lo entiendo. Pero no te preocupes, con el tiempo vas a ir entendiendo —
— Gracias Yuuna, de verdad me alegro de tenerte en esta casa — Deidara la miró con sus ojitos brillosos
— Para mí es un honor acompañarte chico, de verdad. Mis hijos ya no pasan tiempo conmigo me recuerdas mucho a ellos, ademas que mejor que acompañarte y que no te desvíes al mal camino —
La mujer tomó la mano del chico y ambos sonrieron, como si fueran una familia. Al poco rato Deidara ya se había ido a la preparatoria y Yuuna se había quedado para limpiar la habitación del rubio y ordenar la gigante mesa en la cual solo había un plato..eso también ponía mal a la mujer ya que ese chico no merecía estar solo, era un ángel a comparación de chicos de su edad y más ahora no merecía estar solo...
El rubio había llegado a la preparatoria y en la entrada estaban todos los chicos, entre ellos Sasori el cual estaba fumando. Desde que Deidara lo conoció había empezado a fumar pero aún así no se había alejado de él.
— Hola Chicos y Konan — Dijo Deidara llegando a donde estaban
— Buenas Niño — Dijo Pain saludándolo
Todos empezaron a hablar animadamente menos Sasori, ya todos sabían que era muy reservado y poco expresivo
— Hablaste con tus padres Deidara? — Le dijo Kakuzu mientras tomaba de su café
— Eh, no. Más a la tarde les mando mensaje, seguramente digan que si —
— Está bien, así todos ya vamos confirmando si vamos —
Todos siguieron hablando de eso hasta que se acercó un chico con una máscara anaranjada actuando como un niño de 5 años cuando en esa prepa ya casi todos tenían 19, menos Deidara que era dos años menor y por lo tanto tenía 17
— Hola!! — Saludó el enmascarado con su mano a todos los presentes
— Hola — El único que había contestado había sido Hidan
— Como se llaman?! Yo soy Tobi —
Hidan los presentó a todos pero el enmascarado no apartaba la mirada de aquel rubio que estaba acomodando el pircing que le había hecho Pain. Le dolía un poco, pero era normal
— El como se llamaba? — Preguntó Tobi mirando a Deidara
— El se llama Deidara, también es nuevo —
— Mucho gusto Tobi —
Deidara le ofreció su mano y Tobi la estrechó con la suya. Lo que le pareció raro al rubio fue ver cómo usaba unos guantes negros, como si no quisiera dejar rastro de quien era
— En fin, mejor entremos a clase de una vez — Dijo Sasori serio
Los dos chicos separaron sus manos y todos empezaron a caminar hacia sus respectivos salones. Al llegar la hora del recreo todo el grupo estaba junto en las gradas del campo de fútbol, no había nadie más que ellos. Hasta que llegó aquel enmascarado haciendo cosas como si fuera un niño
— Parece retrasado mental.. — Dijo un pelirrojo atrás de Deidara
Todos rieron menos el enmascarado que logró escuchar eso y se quedó quieto en su lugar mirando hacia donde estaban todos. Aquella risa que salió de los labios del rubio le pareció linda pero a su vez escandalosa en sus oídos...