— Levántate Obitooooo — le gritó Shisui a su primo
— Ya voy — El mayor nisiquiera había abierto sus ojos
Su primo ya harto lo agarró de una de sus piernas y lo tiró de la cama haciendo que Obito se queje
— Idiota ya me iba a levantar! — gritó Obito enojado
— Lo siento — Shisui le echó la lengua y salió corriendo de la habitación del mayor
Óbito suspiró y se levantó del suelo para irse a bañar. Salió del baño, se cambió y se puso su máscara solo dejando su boca y la punta de su nariz a la vista
Bajó al comedor con su mochila y la dejó tirada en una de las esquinas para sentarse en la mesa a desayunar mientras sus primos hablaban entre ellos. Al terminar se levantó agarró su mochila para irse
— Nos vemos Obito — Dijo Itachi
Obito solo asintió serio como siempre y salió de la casa sin acomodarse su máscara y ya que aún así no se veía su rostro. Caminó unas pocas cuadras y llegó a la preparatoria donde estaba un rubio peleando con el portero, miró su celular y ya era tarde, se acercó a la pelea y los miró a ambos
— Dei — Lo llamó al rubio con su voz infantil
— Ahora no Tobi — Lo volteó a mirar Deidara
— No le haga caso, venga conmigo — Tobi tomó de la mano al rubio y lo sacó a correr lejos de la preparatoria
El rubio al principio se resistió pero después aceptó. Fueron a una heladería, compraron sus helados favoritos y se fueron caminando hasta un parque un poco solitario
Deidara se sorprendió al ver lo tranquilo que estaba Tobi, ya que en estos pocos días que lo lleva conociendo se dio cuenta que era muy inquieto y a su vez hablador.
Se sentaron en el césped cerca del pequeño río que había y Deidara no dejaba de mirar una parte del rostro de Tobi, no se veía casi nada de este, solo su boca y la punta de su nariz pero se lograba ver una cicatriz en la mitad de su rostro así que con delicadeza acercó su mano a la cicatriz de el chico haciendo que se tensara
— Qué haces? — preguntó con su verdadera voz
— puedo saber que te sucedió en tu rostro..? —
— es una larga historia — Dijo serio y comiendo un poco de su helado
— Puedo oírla, total me sacaste de la preparatoria —
— lo siento por eso —
Deidara lo miró con una ceja alzada y Tobi se cruzó de brazos
— Realmente no lo siento —
Deidara se rió por eso y Tobi solo lo miro en silencio
— Cuéntame tu historia — El rubio aparto su mano de la cara de Tobi
— Está bien —
Deidara lo miró dedicándole toda su atención al chico
Flashback
— Obito ven rápido! — gritó Rin, una chica de pelo marrón corto
— Ahí voy! —
Salí corriendo hasta ella y allí estaba también Kakashi, un peliplateado que usa una máscara que cubre la mitad de su cara
— Si Rin? —
— Ya nos vamos al campamento —
— está bien — Dije sonriendo animadamente. En aquel tiempo era muy sonriente — Vamos entonces —
Empezamos a caminar fuera de la ciudad hasta llegar algo alejados a un bosque, armamos nuestras carpas y hicimos una fogata y nos quedamos contando historias de terror
Hasta que empezamos a escuchar cosas entre los arbustos, Kakashi era el más grande por lo tanto se puso frente a nosotros y yo me quedé al lado de Rin
De los arbustos salieron tres hombres que no conocíamos, los tres portaban armas. Entonces nuestro primer pensamiento fue correr y correr y correr sin decir ni una palabra
Corrimos tanto que decidimos meternos en una cueva mientras los hombres nos buscaban hasta que nos encontraron y bueno, al parecer esa cueva no estaba en buen estado. Por lo tanto con los disparos y nuestro correr las rocas empezaron a caer hasta que cayó una realmente gigante y yo empuje a Rin y Kakashi para que siguieran corriendo
La roca me cayó a mi arriba pero lamentablemente uno de esos hombres logró dispararle a Rin y mal herirla mientras yo seguía ahí abajo hasta que las piedras que seguían cayendo me taparon por completo.
A los dos dias me desperté en el hospital, me dijeron que tenía una herida en la mitad de mi rostro y que Rin había muerto. Kakashi estaba vivo pero en cuidados intensivos por las balas
Fin del Flashback
— Esa es mi historia — Dijo el chico tranquilo
— Tu verdadero nombre es Obito...? — Preguntó el rubio algo aterrado por lo escuchado
— Mjm — Dijo Obito como si fuera lo más normal del mundo — Te pido que me sigas diciendo Tobi frente a todos —
— Está bien... —
Los dos se quedaron en silencio mirando al río, había una pequeña cascada pero poca agua caía ya que el frío ya se estaba empezando a sentir y al bajar las temperaturas los lagos se empezaban a cristalizar
Deidara suspiró y frotó sus manos, tenía frío. Pero unas grandes manos lo envolvieron y lo pegaron en el pecho de Obito para que su frío se vaya de a poco
— Mm... — Fue lo único que dijo el rubio
El ojiceleste se acurrucó en el pecho del mayor mientras que el azabache suspiraba y acariciaba el sedoso cabello de el rubio...