Incluso después de años, ellos no podían creer que estaban cara a cara.
Clyde pensaba que después de que rompieran aquella relación iba a quedar completamente muerta por la distancia que ambos tenían. Y estaba totalmente equivocado.
El destino tení...
Dedicatoria Para todos aquellos amores que pudieron reencontrarse. Para todos los que tuvieron que separarse de sus familias para formar su vida. Para todos los que alguna vez dudaron que esa persona realmente fuera para ellos.
»——————⋆◦★◦⋆——————«
CLYDE DONOVAN
Las despedidas nunca han sido lo mío, de eso estoy completamente seguro.
Despedirse de las personas que más amamos nunca va a ser fácil tengamos la edad que tengamos, podría incluso tener cincuenta y seguir llorando una y otra vez en mi habitación antes de irme sabiendo que estaré lejos de quienes amo.
Y es irónico porque sólo me he tenido que despedir de dos personas que lo eran todo para mi, bueno en realidad lo siguen siendo, incluso visito a una de ellas muy seguido. Igual ese no es el punto, mi hermana fue la primera de la que tuve que despedirme y fue realmente doloroso, y el segundo fue mi ex novio, Craig Tucker.
Es raro mencionarlo ya que era mi novio cuando tenía once años y en la actualidad tengo dieciocho, así que puedo decir que es increíble como las cosas pueden cambiar de un segundo para otro, primero éramos amigos y de la nada unas asiáticas empezaron a emparejarnos haciendo unos dibujos un tanto fuera de lugar si podría decir.
En fin, pasaron muchas cosas durante ese periodo de tiempo y no creo arrepentirme nunca de ello.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narrador omnisciente
Años atrás..
Un chico de cabello castaño se encontraba acostado en su cama, el mismo estaba en posición fetal.
No había podido dormir en toda la noche, lo había intentado pero simplemente no pudo, el miraba el techo de su habitación como si fuera lo más interesante que hubiera podido apreciar en toda su vida.
Empezaba a salir el sol, el bufó al escuchar su alarma, no quería, se negaba a tener que levantarse para ir a estudiar. Y no quería por el hecho de que sería su primer año sin su compañero de toda la vida, Craig Tucker.
Entonces alguien tocó la puerta.
—¿Clyde?—Habló su padre del otro lado—
—¿Qué?—Respondio de una manera odiosa—
—Debes levantarte, hoy es el primer día de clases, no quiero que llegues tarde.
—No quiero ir papá, de verdad no quiero..—Dijo y su voz se quebró, ya no quería llorar pero no podía evitarlo—
El mayor no dijo ni una sola palabra, sin embargo soltó un suspiro audible para su hijo menor, el pasó a la habitación, una vez dentro cerró la puerta detrás de el y caminó a la cama del chico. Se sentó a un lado de el, Clyde se sentó en la cama de igual manera, las lágrimas salían nuevamente de sus ojos y maldecía de mil maneras el ser tan débil.
