DESCONOCIDOS © (Y.M) OMEGAVERSE

chapter 16

— ¿¡Conocer a tus padres!? — gritó exaltado con sus pequeños ojos bien abiertos.

— Si — Respondió el Alfa tranquilamente.

— ¿P-porque lo dices tan tranquilamente? — Dije hipando. — ¿Y si no les caigo bien? — solloza. — ¿Y si me tachan por mentiroso? ¿S-si me miran mal? — se suelta a llorar.

Yoongi ríe levemente y va hasta el mueble donde está el Omega para sentarse a su lado atrayendolo hacia su cuerpo y abrazándolo.

— Omega bonito, a todo el mundo le caes super bien, además, ¿Quién miraría mal a un bolita de ternura como tú? — Dice acariciando su pancita cubierta por una fina tela, la levanta un poco y siente como el aroma de su Omega se intensifica, tratando de llamar su atención.

— Me gustan tus brazos, Yoon — dice acurrucándose entre sus brazos, se sentía a gusto entre los brazos del Alfa, lograba hacerlo ronronear como un pequeño minino.

Yoongi interpretó el intenso aroma de Jimin como una forma de coqueteo, ya que cada vez que un Omega soltaba feromonas intentando llamar la atención del Alfa, era una forma bastante notoria de que nuestra interés por él o ella.

El lobo del rubio solo saco movió su cola con rapidez y mostrando el pecho, se sentía tan afortunado de ser coqueteado o que al menos puede decir que su Omega tenía cierto interés en él y su humano.

— A mí me gustas tú... — Susurro bajito, siendo inaudible para el pelirosa.

— Yoonie... — llamó casi susurrando, sin embargo Yoongi pudo oír.

— ¿Mm?

— ...Quiero comida... — Dijo para luego esconder su rostro lleno de vergüenza, el Alfa río.

— Está bien, caramelito — Jimin salió de su escondite y levanto su mirada.

— ¿Caramelito..? — Yoongi asintió.

— Sí, me gusta ese apodo para ti, ¿A ti te gusta? — Expresó sonriendo mientras seguía acariciando el pequeño bulto del vientre del Omega.

Jimin sonrió haciendo sus ojos medias lunas, haciendo que Yoongi también sonriera aún más. — Me gusta — afirmó tímidamente.

— Bien, ahora..., Dime caramelito — Dice ahora acariciando los cabellos rosas del Omega. — ¿Qué se te antoja? ¿Mmm? ¿Algo dulce? — lo mira sonriente.

— Uhmm — hizo un puchero inconscientemente. — pastel de mandarina, ¿Se puede? — lo mira haciendo unos ojitos que nadie se podía resistir, y Yoongi no sería la excepción.

Rendido asintió. — Bien, saldré a buscar ese famoso pastel de mandarina, que buen gusto por cierto — Le guiña el ojo coqueto.

El pelirosa bajo la mirada totalmente sonrojado.

— S-si..., Parece q-que uno de nuestros cachorros sacaron tus gustos... — Ve como Yoongi se levanta, el solo se acomoda en el mueble estirando sus piecitos.

— Tal vez no solo uno, sino ambos — Sonrió ilusionado caminando hacia la entrada, dispuesto a colorcarse los zapatos.

Jimin lo siguió con una traviesa mirada, cuando el Alfa paro, su vista llegó a su entrepierna, podía notarse un pequeño bulto, pudo recordar la vez que se acostaron en la fiesta, ¡Diosa! esa cosa que tenía entre las piernas era grandiosa, podía imaginarse a él encima del Alfa montando su-. De tan solo imaginarlo sentía sus hormonas subir hasta las nubes, rápidamente sacudió la cabeza con total vergüenza, tocó sus mejillas calientes y bajo la mirada.

— ¿Te pasa algo, Caramelito? — Escuchó del Alfa, rápidamente negó muy avergonzado por sus pensamientos, incluso llegó a suponer que tal vez Yoongi podía leer su mente en ese momento.