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-¿Calíope?- me ve con confusión y asombro- ¿sois vos de verdad?- mientras se dispone a tomar la empuñadura de su espada

-¿Y quién si no?- me burlo para bajarme la capucha que me cubría el cabello- he oído que habéis perdido el espejo de Ravenna y este de aquí se niega, yo lo buscaré y lo llevaré- me ven con asombro

-Ni lo sueñes, tú eres una fiel servidora de la reina Ravenna, seguro que se lo llevarás a su hermana- acusa el cazador, veo por el rabillo del ojo una lechuza de hielo observando todo

-Estaba bajo un hechizo, como bien saben todos ella era una bruja, estaba bajo sus hechizos, no era consciente de lo que hacía, era su marioneta, de verdad que quiero demostrar que ya no soy esa, dejadme ir a buscar el espejo- alzo las manos en señal de que no voy a hacer nada, me ha dolido tener que decir esas palabras pero si quiero que me crean he de fingir demasiado bien

-En ese caso yo iré con ella, no me fio ni un pelo de ella- da un paso al frente el cazador mientras me fulmina con la mirada

-Y nosotros vamos con los dos, nos darán una buena recompensa a cada uno- pongo los ojos en blanco, enanos, parece que el hombre se ha dado cuenta de la lechuza y le lanza algo que hace que se rompa y se da cuenta de la verdad de que están siendo vigilados, acaban aceptando que yo les acompañe para demostrar que quiero redimirme

-Por cierto William, no le digas nada a Blancanieves, quiero que sea una sorpresa cuando regresemos con la noticia- le guiño un ojo con diversión antes de alejarse con sus patéticos soldados

-Vamos, entre antes lo encontremos antes me desharé de ti- dice con desprecio el cazador

-Querido, yo ya estoy preparada- doy un silbido alto y fuerte y se acerca mi corcel ya preparado- así que venga, date prisa, entre antes lo encontremos antes te perderé de vista- sonrío de forma burlona y él resopla con fuerza y choca contra mi hombro para alejarse, escucho un carraspeo y proviene de uno de los enanos- ¿algún problema, enanos?-

-Hemos oído hablar cosas de ti y no nos fiamos un pelo de ti, puede que los demás se fíen de ti, pero nosotros sabemos de lo que eres capaz- me acerco a ellos de forma intimidante ya que están bajados de los ponys 

-No me cuestiones enano número 1, no tienes ni idea de lo que puedo hacer sin que te des cuenta a plena luz del día y rodeados de personas, y número 2, abre esa boca y te cortaré la lengua, ¿ha quedado bien claro?- miro primero al más alto y luego al más bajo y gordito, los dos asienten con rapidez- bien hecho- les sonrío antes de hacer brillar mi ojo por un momento antes de subir al caballo y mirarlos- en marcha- los dos se apresuran a subirse a sus monturas y seguirme en busca del cazador y lo encontramos saliendo del establo sobre otro caballo

-¿Te sabes el camino?- me pregunta aunque creo que piensa que voy a decir que sí

-La verdad es que a pesar de los años que viví aquí, hay cosas que he olvidado, así que te sigo, cazador- me ve con el ceño fruncido

-Tengo nombre, lo sabes, ¿verdad?, me llamo Eric-

-Ya lo sé, pero te conocí con el nombre de cazador, y para mí te seguirás llamando así o al menos te seguiré llamando así, cazador y a ellos enano 1 y enano 2- señalo con la cabeza a cada uno que me ven molestos

-Hay que ver lo molesta que eres niña- ante ese nombre me detengo y le veo con seriedad y frialdad

-Créeme muchacho que tengo más edad de lo que piensas y he vivido más de lo que tú lo has hecho y he luchado mucho más que tú, así que vuelve a llamarme de esa manera y me encargaré de que te tragues tus palabras, ¿entendido?- 

-Sí señora- me adelanto y los dejo atrás, esto será más difícil de lo que pensaba

Seguimos el camino y vemos que se han desviado al oeste por las marcas en el suelo y se fueron probablemente hacia el bosque para poder acampar. Mientras trato de ver lo que los árboles han visto y escuchado trato de ignorar las burlas de los enanos que al parecer son hermanastros pero de la misma madre, hacia el cazador que intenta que no nos sigan pero como quieren la recompensa no se van a marchar, ese es uno de los objetivos, el otro y es por parte del gordito, su preocupación por Blancanieves, así que él fue uno de los siete que la ayudaron a conquistar el reino y a matar a mi reina, bueno, ya sé a quién más cargarme. Seguimos cabalgando bajo el mandato del cazador hasta que vemos una gran bandada de cuervos sobre una zona del bosque y vamos a ver qué es y resultan ser los soldados que portaban el espejo muertos y distribuidos, alzo la mirada para observar a las aves que revolotean sobre nosotros para comenzar a comer los restos de los soldados caídos, verlos me hacen recordar el amor de mi reina por ellos, nos bajamos de los animales para poder inspeccionar toda la zona 

-Fueron atacados- dice cazador y veo algo brillante clavado en un costado de un cuerpo y lo cojo, es la punta de una flecha

-No, se atacaron entre ellos, son sus propias flechas, en parte- aclaro al observar bien

-¿Por qué?, son soldados de la reina- dice el enano 2, el gordito

-Este tipo de flechas no son comunes- digo como quien no quiere la cosa, cierro los ojos y escucho los árboles más allá de las burlas de los enanos y me centro en lo que han visto y les atacó lo que sospechaba, Goblins, pero no diré nada

-Tenemos que encontrarlo antes que Freya, tenemos que salirnos del camino- dice tras encontrar un rastro de algo en el suelo

Ahuyentamos a los caballos tras coger nuestras cosas. Llegamos a una taberna al anochecer y el cazador intenta conseguir información mientras me siento en una mesa y los enanos hacen lo mismo. Fuera está lloviendo, pero esta vez no es cosa mía, y mientras tanto se ponen a hablar sobre cómo identificar a las mujeres enanas.

-Una pinta señor- le pido al dueño y coge una jarra y la hunde en un barril de cerveza y me la da a la espera del pago - paga él - señalo al hombre que me ve molesto antes de sentarse- se supone que los hombres invitan a las damas- hago como si fuera lo más obvio, me meto en mi mundo de pensamientos mientras que aparecen otros cazadores a pelear con el que me acompaña y los enanos, mientras tanto yo observo la pelea y anoto mentalmente sus puntos débiles para cuando tenga que enfrentarme a él y también me bebo la cerveza veo que lo lanzan atravesando la pared y se disponen a atacarme, pero no me han reconocido algunos de ellos, menos mal que los enanos han ido a ayudar a su amigo- que ni se os pase por la cabeza, soldado- me ve con asombro al reconocerme

-General Woods os habíamos dado por caída, es bueno ver que nos equivocamos, sentimos no haber podido proteger a nuestra reina- se disculpa al saber mi fidelidad a ella

-Lo sé, pero los tiempos van a cambiar, si aún siguen jurando lealtad a su majestad, acudir al reino de la Reina de Hielo, al norte y decid que yo os mando- 

-Está bien, mi señora, así haremos- asiento antes de salir y ver al cazador inconsciente y siendo atado por mi cómplice y los enanos un tanto lo mismo mientras está lloviendo bastante fuera 

-Pensé que tardarías más - comento mientras arrastro al más grande a un edificio en ruinas alejado de dónde estábamos

Hasta que nos volvamos a ver Donde viven las historias. Descúbrelo ahora