Capítulo 10

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TARTA DE QUESO "Quédate Esta Noche"

16 onzas de queso crema reblandecido

2/3 taza de azúcar

1 taza de crema agria

5 huevos grandes

1 cucharada de extracto de vainilla

½ taza de crema espesa

NamJoon

—Joder, Jin —Me pasé los dedos por el cabello mientras tomaba mi polla en su boca.

Bajando por su garganta, una y otra vez, giró su lengua contra mí de una manera que me hizo rogarle que no se detuviera.

Mantuvo sus ojos en los míos mientras me daba placer, y gemí cada vez que su boca me dejaba por más de un segundo.

Cuando tomó el ritmo y me chupó más fuerte, los músculos de mis piernas se tensaron.

—Espera. —Respire—. Creo que necesitas moverte...

—¿Por qué? —Movió su cabeza hacia atrás, todavía provocando la punta de mi polla con su lengua—. ¿Estás a punto de venirte?

—Sí. —Esperaba que se alejara y se sentara, pero me volvió a meter en su boca, meneando la cabeza arriba y abajo hasta que me vine en su boca.

Entonces tragó. Hasta la última gota.

De acuerdo, nunca te voy a dejar salir de esta habitación...

Completamente aturdido por su actuación, me recosté contra las almohadas y cerré brevemente los ojos.

Hoy fue el quinto día consecutivo que pasamos encerrados en un resort de lujo. También fue la primera vez que usé voluntariamente mis "días de incapacidad" en toda mi carrera de una década, y la primera vez que él permitió que su personal manejara la repostería sin el durante más de unos pocos días seguidos.

Aunque nuestras escapadas sexuales se sintieron incesantes desde el momento en que nos registramos en la habitación, nos las arreglamos para pasar horas hablando en el balcón, pedir el servicio de habitaciones gourmet para cada comida y compartir tiempo en el jacuzzi privado de la suite.

No quería admitirlo, pero sentía como si lo hubiera conocido por años, no días. Tampoco quería que nuestro tiempo juntos terminara, ya que cada segundo parecía perfecto. Nunca hubo un silencio incómodo, nunca un momento de discusión que no terminara en risas o su boca en la mía.

—¿Tienes planes para esta Navidad? —preguntó, apoyando su cabeza contra mi pecho.

—Nada, excepto estar de guardia para emergencias. —Abrí los ojos—. ¿Tú?

—Mi hermano y yo tendremos a nuestros padres de visita por unos días. Vamos a ir a patinar sobre hielo, a pasar una noche caminando por Christmas Tree Lane y a tener una gran cena festiva en mi casa. —Me miró—. Eres más que bienvenido a unirte a nosotros cualquier día. Tu hermano también puede venir.

—¿No crees que es demasiado pronto para conocer a tus padres?

—Bueno, no, yo... —Se sonrojó—. No quise decirlo de esa manera, quise decir si no tuvieras ningún plan... y te presentaría a ellos como mi amigo.

—Mmmm. Lo consideraré. —Froté las manos contra su espalda desnuda—. Ya que trabajaré durante las fiestas, mi hermano y yo nos vamos de vacaciones a Nueva York para ver a algunos viejos amigos durante unos días este fin de semana. —Lo miré a los ojos—. Eres más que bienvenido a venir.

—¿No crees que es demasiado pronto para que conozca a las personas en tu vida? —Se burló de mí.

—No. —Sonreí—. Prefiero presentarte como mi novio, pero como ya me has llamado tu "amigo", creo que podemos tener nuestro primer problema... —Me encantaría ir —dijo—. ¿Qué necesito llevar?

—Nada de lo que no podamos hablar más tarde. —Me incorporé lentamente y me levanté de la cama, agarrando su mano—. Es hora de continuar donde lo dejamos.

Lo llevé a la sala de estar que daba a las ventanas panorámicas. Empujándolo contra el cristal, me agaché, le bajé las bragas de lazo rojo y las dejé caer al suelo. —¿Quieres que empiece ahora o más tarde? —le pregunté, besando sus labios.

—¿Comenzar qué?

—A grabar —le dije, señalando dónde estaba su teléfono apoyado en la esquina—. Creo que el deseo de alguien era querer que grabaran algo del sexo, para que pudiera verlo una y otra vez.

Su rostro se puso rojo brillante, y se quedó sin habla.

—Entonces —le dije, golpeando suavemente su culo—. Estoy a punto de follarte contra estas ventanas. Luego me sentaré en esa silla y te diré que te sientes en mi cara, para poder darle a tu polla otra ronda de besos nocturnos—. Lo miré a los ojos—. ¿Qué parte quieres grabar?

—Todo. 

Sweet Christmas wishes - NamJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora