Verde y azul

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El mundo se dividió en reinos, mientras más poderosos más grande era su territorio, el reino más conocido y poderoso era el Egeo, mandado por el rey Thomas y la reina Laura, personas sumamente serias pero amables, simplemente eran buenos gobernando.

Al ser el reino con mayor territorio y poder, tenían pactos con pueblos vecinos, se protegían mutuamente, su aliado más cercano era el reino Biscotti, un pequeño pueblo con poca población gobernado por el rey Stephen y la reina Linda.

Todos los reinos eran dividíos por Reyes, nobles, gente del pueblo y pecadores, las divisiones eran tan marcadas y respetadas que rara vez los reyes y nobles pasaban tiempo con la gente del pueblo. Solo había una ocasión en la que había una posibilidad de que alguien del pueblo pudiera convivir con nobles y reyes, incluso tener la oportunidad de convertirse en uno de ellos, esa situación solo se podía por el medio de los estudios, la escuela, cada año se hacía una convocatoria para que aleatoriamente una persona de nivel bajo entre todos los reinos estudie en la escuela en donde todos los hijos herederos y nobles lo hacían, era la escuela más prestigiosa por lo tanto todo estaba pagado y hasta tenían que ser residenciados por alguna familia nobles o reyes al azar.

Se acercaba la época de admisiones para las escuelas por lo que el sorteo estaba a la vuelta de la esquina en esta ocasión Egeo y Biscotti iban a conducir el evento. Las preparaciones eran sumamente importante, los hijos de los reyes debían representarlos en el evento y es un honor para cada heredero pero para Craig Tucker era algo terrible, el hijo de Thomas y Laura odiaba tener que asistir a esos eventos y esta vez hasta presentarlos tenía. Por otra parte Butters, hijo de Stephen y Linda, estaba nervioso no quería avergonzar a sus padres.

Todos los pueblos se inscribieron al instante, este año la convocatoria era para chicos de 14 a 16 años de edad, todos los padres metieron presión para que sus hijos pudieran ser parte de una oportunidad tan importante en los reinos, el sorteo se haría el miércoles al anochecer y todos los pueblos debían estar al pendiente.

Los Tweak eran una pequeña familia que vivían en la orilla de Biscotti, vivían en el límite antes de entrar a Egeo, eran unos jóvenes panaderos con una cafetería en el pueblo, la más concurrida de hecho, usualmente los reyes mandaban a sus sirvientes a conseguir pan y café de ahí por lo que tenían un poco de contacto con la realeza. Ellos tenían un hijo llamado Tweek, él les ayudaba siempre que podía y nunca se preocupó por inscribirse en las convocatorias porque no quería ilusionar a sus padres aunque el realmente deseaba ir a estudiar.

Este año sus padres lo inscribieron en secreto y sentían lo suficiente confiados por las influencias que tenían gracias a su cafetería, realmente querían ver a su hijo feliz estudiando y con la oportunidad de por fin hacer amigos ya que la mayor parte del tiempo estaba solo.

Tweek era un chico con ansiedad y problemas para socializar, nunca fue bueno haciendo amigos, solo le gustaba quedarse solo en casa o pasear por los bosques de al rededor del reino, era su momento más calmado. Aveces imaginaba que su familia era de clase alta y todos lo querían pero sabía que eso solo podía suceder en sus sueños.

Por otro lado Craig era más serio, era muy inteligente pero pocas personas lo notaban, al ser hijo heredero era sumamente atractivo  lo cual le causaba problemas al sentir toda la atención de los demás. El realmente odiaba las multitudes, el simple hecho de convivir le daba asco, prefería la naturaleza, amaba a los animales tenía varias mascotas que cuidaba junto a su hermana menor pero su mascota favorita era un cobaya, realmente lo amaba, claramente no solo pasaba el tiempo con animales, también tenia algunos amigos, pero los más cercanos eran realmente pocos.

Entre sus amigos cercanos se encontraba el pequeño Butters, ese realmente no era su nombre pero a sus papás le gustaba mantenerlo en secreto para causar más misterio. Butters era un niño muy tierno y vulnerable, era débil he ingenuo pero tenía un enorme corazón. De hecho era fan de la famosa cafetería de los Tweak, aveces escapaba con un disfraz para disfrutar de aquel lugar, tenía muchas ganas de conocer a Tweek, no sabía su nombre pero le daba curiosidad conocer a ese joven trabajador.

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Holaaaaaaaaa
Traje una nueva historia que en verdad espero les guste, todavía me salen notificaciones de la anterior y lo agradezco muchísimo. Esta historia es completamente diferente, de verdad la estoy escribiendo con mucho amor y se que esté capítulo es corto pero es el primero así que se puede considerar como piloto. Gracias por leer y muy pronto actualizaré. Muak

-Pollo