9

4 0 0
                                    

Advertencia:contenido sexual















—Todo bien—hablaba por celular—Si así es, puedes creerlo—sonrio.

—Minho—hablo molesto.

—Te llamo despues—borro su sonrisa—Y ahora que?

—Sigues con tu "amiguito"—señalo con los dedos.

—Cálmate Han, no empieces.

—El que empieza todo eres tu.

—Deja de atacarme así Han!—Se levanto del sofá.

—Es que ya no eres tu, realmente te estás comportando como una pe...

—Dilo y me largo!—amenazó con los ojos muy abiertos de coraje.

—A donde vas a ir solo—hablo con ironía.

—Yo puedo ir a donde quiera sin pedirte nada—intento alejarse pasando a su lado golpeándolo del hombro.

—Hasta crees que te daría el gusto—lo jaloneo horrible.

—Sueltame!

—Callate!—lo golpeó en la cara con tanta fuerza sacndole sangre de la boca.

—Estas loco Han?—desconcertado

—Así te gusta que te traten maldita perra!—se acerco a él acorralandolo contra el sofa que estaba detras suyo.

—Déjame Han—Intento irse pero Han lo sujeto para evitarlo.

—Vamos a ver si te gusta la manera en la que quieres que te traten—cambio su semblante a uno desconocido.

—Maldita sea Han quitate!

—Si por las buenas no quieres será por las malas.

Su cordura y sus celos lo habían arrebasado, sus teorías rondaban su cabeza y no estaba del todo bien.

Pensaba en que realmente Minho ya no lo amaba y que estaba con alguien más, pensaba en que esa otra persona lo hacía feliz mientras él se moría de la rabia.

Sin dudarlo lo había tirado en el sofá aun sin soltarlo, para luego besarle el cuello y dejarle algunas marcas.

Minho no quería y seguía peleando por quitárselo de encima.

Desde cuando Han tiene más fuerza que yo, esto está mal yo no pude haberme olvidado de mis movimientos.

Han al ver que Minho seguía moviéndose, lo abofeteo otra vez para que dejara de hacerlo lo cual funviono un poco.

Le desabotono la camisa roja que llevaba puesta para dejar ver su tan perfecto cuerpo aun.

Siguió besándolo bajando de poco en poco deleitándose con lo que tenía frente suyo y por un momento de descuido en el que bajo la guardia y disminuyó su fuerza en el agarre, Minho lo golpeó.

Sim dudarlo Han se quito por sentir dolor en su entrepierna, maldijo para si mismo viendo como ahora era el castaño quien opto por regresaré un golpe en la cara.

—No me vuelvas a tocar oíste!—furioso.

—Jaja—río amargadamente—Tendrás que dejar de dormir para que no te pase nada Minho.

—Imbecil—se cubrió su pecho—Encerio que me sorprende el hecho de que quieras violarme Han—asqueado—Y déjame decirte que entre tu y yo, no va a volver a pasar nada, no después de esto.

—Pues no estés tan seguro de eso.

—Reacciona Han, pareces un maldito enfermo, tu no eres así.

—Tu me hiciste así ahora no te quejes.

Candy Play KillerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora