~𝐓𝐎𝐌
-si cariño, ve, mucha suerte, diviértete.- se separó un poco aunque yo no soltaba el agarre en su hermosa cintura, me miró a los ojos y de un momento a otro me dió un beso en la mejilla del cuál yo me sonrojé.
Me llamaron para salir al escenario, la solté y me dirigí al primer mencionado, aunque yo solo podía pensar en una cosa "𝑐𝑎𝑟𝑖𝑛̃𝑜..".
Fuimos y comenzamos el concierto, la verdad fue muy divertido, amo hacer esto, las fans estaban locas. Después de algunas horas dimos por finalizado el concierto, al salir de escenario, ahí estaba ella, parada en el mismo lugar donde me dijo que me esperaría, con las manos cubriendo su boca y dando pequeños saltos, dando a entender que estaba emocionada.
-lo hiciste geniaaal!!- corrió hacía mi y me levantó la palma de su mano para yo chocarle los cinco, y eso hice.
-gracias linda, ven vamos al camerino.- le sonreí, la tomé del brazo suavemente y nos dirigimos al camerino. Entramos, yo me recosté en un sillón y ella se puso justo a mi lado, me encanta, ella me encanta.
-eso estuvo geniaal me encantó como hicis..- fue interrumpida por Bill, quién abrió la puerta y se sentó a su lado.
-hey!- dijo mi hermano.
-hey, lo hicieron genial, son los mejores- lo felicitó, pero a mi no me pudo terminar de decir lo que le gustó que hice.
Preferí dejarlos solos para que charlaran, al fin, creo que se gustan, aunque a ella le gusta Bill y a mi me gusta ella. Me levanté del sillón y abrí la puerta.
-a dónde vas?- me preguntó la chica.
-voy a afuera, voy a fumar un cigarrillo- y sin dar más detalles, salí del camerino y cerré la puerta, fui al camerino de los chicos Gustav y Georg.
-qué ocurre?- me preguntó Gustav
-es Bill y Camila- le dije mientras me sentaba en el sofá mirando hacia el techo.
-otra vez tus celos?- se unió la voz de Georg a la conversación.
-no son celos- cerré los ojos, estaba cansado por el concierto y enojado por lo de Bill y Cam.
-como que no, Tom, no engañas a nadie- se puso de pie frente a mi.- dile que te gusta, seguramente a ella también le gustas-
-no, esque no le gusto, le gusta Bill- lo interrumpí subiendo más mi tono de voz
-No es cierto Kaulitz, no lo sabes, y se nota que le gustas, haz lo que creas necesario- se acercó a la puerta del camerino -y ya hay que salir, ya llegaron los invitados de la fiesta y el bar ya se abrió- salió y de tras de él salió Gustav.
Me paré del sillón y fui a donde estaban Bill y Camila.
-chicos, ya llegaron los invitados y ya abrieron el bar.- dije después de abrir la puerta del camerino, me recargué en el marco de la puerta y recibí las miradas de los dos.
-oh dios! Voy a ir, quiero un trago- dijo Bill, se levantó y se fue al bar. Yo iba a irme igual pero la voz de la chica me hizo parar.
-qué te ocurre Kaulitz- me dijo mientras de señalaba con su mirada que me sentara a su lado, lo cual, hice.
-Nada- me senté a su lado luego de cerrar la puerta, ni siquiera la miraba, solo miraba al techo.
-te pregunté, que tienes Kaulitz- dijo subiendo un poco la voz, se empezaba a molestar.
-y yo te contesté que nada.- seguía mi mirada fija al techo.
~𝐂𝐀𝐌𝐈𝐋𝐀
Ni siquiera me volteaba a ver, solo miraba al estúpido techo.
