Love Drove Me Crazy

Capitulo 20

Los túneles comenzaron a verse más oscuros de lo normal, entre ellos había dos chicos corriendo tratando de salir.

-Bien. Intenta mantenerte de pie- decía Stiles a la pelirroja -El plan no resultó muy bien, así que vamos a necesitar tu ayuda, ¿sí?

-¿Tenían un plan? -preguntó como pudo Lydia.

-Yo no. Solo era entrar y salir- respondió el cazador acercándose ambos mientras tomaba el brazo de Lydia para ayudar.

Al pasar por una puerta, Lydia se dejó caer al suelo.

-No puedo contenerlo. ¡No puedo!

-¡Lydia!

-¡Chicos, corran!

Parrish alejó a Stiles, mientras Daniel por su cuenta se coloque detras de una pared.

Lydia gritó. Sin embargo, fue tapado por Parrish al agarrarla. Ambos humanos tosieron un poco por la tierra que salió.

Parrish salió entre el polvo cargando a Lydia en brazos.

-¿Por dónde?

De la nada salió el alfa quien al ver al chico de rizos quedó en completo shock. Al parecer las palabras de la quimera eran ciertas.

Theo había hablado con Scott para avisarle que el ojiazul salió corriendo del hospital y no parecía ser el mismo Daniel de siempre.

-Por aquí. Vamos- dijo Scott en cuanto reaccionó.

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Luego de unos minutos, los chicos y el oficial se encontraron con Liam quien al ver al cazador se sorprendió por completo. Lo único que sabía era que se encontraba en el hospital por un colapso por lo sucedido con su hermana.

-Hay una puerta adelante- habló el beta sin dejar de ver al Argent.

-¿Y Mason?- preguntó su alfa

-En eso esta. Confía en mí.

-¿Qué...? ¿Qué pasa?- cuestiona Lydia.

-Plan B- responde el oficial.

-¡Liam, despacio!- reclama Stiles al verlo andar más rápido.

-¡Liam, espera!- intentó detenerlo Scott.

El rubio se acercó a una reja para después agarrarla con ambas manos para así poder abrirla.

Todos siguieron caminando saliendo por una alcantarilla afuera de Eichen.

Daniel tuvo que agarrar a Stiles del cuello de su camisa para que el Jeep no chocará con el. Malia y Kira bajaron de este.

-¿Puedes pararte?- preguntó Parrish a la banshee, y la ayudó a mantenerse de pie.

-¿Está bien?- cuestionó Malia preocupada.

-No, tenemos que irnos- respondió el alfa angustiado.

-Dame las llaves. Tenemos que llevarla a la clínica- habló el dueño del Jeep extendiendo su mano. A lo que Malia le dio las llaves.

De pronto, Parrish chocó contra el auto. Al voltear, vieron a Tracy sosteniendo a Lydia del cuello apunto de encajar sus garras.

-Lo siento, pero ella vendrá conmigo- habla la chica kanima.

-Está bien. Tracy, espera. No sabes qué va a pasar- dijo Scott tratando de calmarla.

-Me la voy a llevar. Eso es lo que pasará, y ninguno de ustedes me lo impedirá- respondió Tracy mirándolos