Una vez más

Capitulo 3

Terminaron las clases y pronto fui a hablar con aquella niña nueva, tenía la intensión de esperar hasta la tarde para ir a conocer a su familia junto con mi madre y conocerla pero... Soy un poco impaciente y ese vestido tan llamativo no dejaba de robar mi atención.

-Bill: Hola, soy Bill, mucho gusto... (poniendo su mano sobre su nuca) amm espero que puedas sentirte cómoda acá, no te presentaste en frente de todos así que... ¿Cómo te llamas?

-Victoria: Hola, mucho gusto, me llamo Victoria y... tiene mucho tiempo que no convivo con personas, es por eso que preferí sentarme en lugar de dar una presentación, me da mucha pena jaja

-Bill: (susurrando) Victoria.. es lindo

-Victoria: ¿Cómo dices?

-Bill: Que es bueno que estés de regreso en una escuela jaja, ¿Vives cerca de aquí?

-Victoria: No lo sé, mi padre vino a dejarme pero no podrá venir a traerme, no pude memorizar el camino y...

-Bill: (interrumpiéndola) Si quieres yo te puedo mostrar un poco la ciudad, capaz y encontramos el camino a tu casa..

-Victoria: No me gustaría molestar pero.... ya que te ofreces, muchas gracias.

-Te recomiendo poner en esta parte la canción: Howl's Moving Castle [OST - Theme Song]

Caminamos un poco hacia mi bicicleta, me subí y esperé a que ella se montara en la parte trasera pero no lo hizo..

-Victoria: Jamás me he subido a una, tengo miedo a caerme

-Bill: No se preocupe señorita Victoria, está en las manos del mejor conductor de bicicletas en el mundo

Ayudé a Victoria a subirse y empecé a mover las piernas para rodar y rodar... El día estaba soleado y había un viento espectacular... Iba un poco despacio para no asustar a mi acompañante... pero pronto empecé a rodar y a rodar, cada vez más rápido, cada vez sentía en mis mejillas el frío del viento, quería enseñarle lo maravilloso de la ciudad..

-Victoria-

Me subí temerosa a la bicicleta, jamás me había subido a una y menos con un extraño, pero era demasiado emocionante, puse mis manos sobre sus hombros y alcé un poco mi vestido, empezó a avanzar poco a poco, se sentía tan magnifico, podía sentir como el viento rozaba mis mejillas y como movía mi vestido al andar, me sentía viva y demasiado feliz. Empecé a sentir como avanzábamos cada vez más rápido, no tenía miedo, solamente no quería que el viaje terminara.

Desde hace ya mucho tiempo que no disfrutaba un día así, hace mucho tiempo que no salía a ver una ciudad, que no veía a demasiada gente andando, que no experimentaba esta hermosa sensación de libertad, gracias a este extraño que hoy se me acercó estoy sintiendo lo maravillosa que es la vida...

Pasamos por muchos lugares, un parque público muy hermoso, con una fuente de un tamaño inimaginable, con muchas flores y muchas personas andando en el; Pasamos en la orilla de un río, podían verse a los pájaros tomar agua en este, se veían los pescados desde donde pasábamos y muchas flores a su alrededor, creo que esta ciudad era la ciudad de las flores... Pasamos por un parque de diversiones un poco aislado, pero en donde se escuchaban las risas de aquellos niños y de sus padres, pasamos por la alcaldía, por un supermercado y también por un salón de peliculas, algo nuevo para mi, también pasamos por muchas tiendas en donde vendían muchas cosas, juguetes, telas, panes, frutas, remedios, comida y flores... ¿Flores?, claro, esa florería era la que me había puesto la idea de ponerme un vestido tan llamativo hoy, la reconocí inmediatamente por las flores naranjas.

-Victoria: Ahí es Bill, recordé el camino a casa.

Bill se detuvo un poco brusco porque quería saber el camino a casa de Victoria.

-Bill: ¿Hablas en serio?, ¿Por donde tenemos que ir?

-Victoria: ¿Ves esa florería de allá?, ¿en donde hay demasiadas flores naranjas?, después de ahí a 50 pasos está mi casa

-Bill: ¿Cómo sabes que son solamente 50?

-Victoria: Porque he salido con mi madre a experimentar el lugar y conté mis pasos de mi casa hasta esa espectacular florería, y digo espectacular porque gracias a ella he decidido usar un vestido tan llamativo hoy, quise verme como esas lindas flores naranjas y así llamar la atención de algún ruiseñor, pero creo que a estos pájaros solamente les gustan las flores.

-Bill-

Vaya, jamás había escuchado algo más lindo que esto... Gracias a las flores que puse un día antes pude ver lo increíble que se veía Victoria con un vestido naranja. Creo que ahora soy un ruiseñor por haber puesto mis ojos en aquella niña tan linda y llamativa, aquella niña con ojos de gato que había tomado mis hombros para sentirse segura mientras sentía el viento en sus mejillas... aquella niña era algo especial, y sentía una conexión con ella, algo que no había sentido con ningún amigo o ninguna persona antes.

Caminamos los 50 pasos que ella decía y justo cuando nos detuvimos vi su casa, era tan linda y tan romántica que podía pasar horas viendo como los pájaros andaban por ahí... Victoria era una niña espectacular, tenía ganas de conocer más de ella y poder ser amigos, buenos amigos.

-Victoria: Estoy tan agradecida contigo Bill, me has ayudado a volver a casa ya demás me has dado un tour por la ciudad en menos de 1 hora.

-Bill: No es nada, espero que te haya gustado mucho

-Victoria: Claro que sí... ¿Te gustan las galletas?, como agradecimiento te haré unas de fresa que aprendí a cocinar con mi abuela..

-Bill: No es necesario, pero ya que insistes, abriré mi apetito para cuando me las des

Nos despedimos diciéndonos un adiós con las manos, había sido muy lindo poder saber donde vivía y había un pretexto más para poder convivir con ella, las galletas.

Llegué a casa y guardé mis cosas, mamá no estaba en casa así que me dirigí nuevamente a la florería.

-Bill: Mamáaa, ¿Estás ahí?... Mamáa

-Mamá: Si Bill, acá estoy, ¿Cuál es la urgencia?

-Bill: Se donde vive Victoria mamá, ¿iremos a visitarla hoy?

-Mamá: ¿Victoria?, ¿Quién es Victoria?

-Bill: La niña nueva, hoy pude acompañarla hasta su casa porque no sabia el camino de regreso, y ¿sabes que es lo mejor? (un poco tímido), creo que también le gusta el color naranja.